Karina Mazzocco será madrina de “El Nido”, un ámbito de estimulación, desarrollo y contención infantil que HACE CENTRO EN BECCAR
15/7/13. Karina Mazzoco y el Intendente Gustavo Posse, participarán este jueves 18 de julio, a las 11 de la inauguración de “El Nido” (Avenida Rolón 1879, Beccar). La modelo y conductora será la madrina de este Centro de Desarrollo Infantil y Estimulación Temprana que ciertamente se comporta como un hábitat, donde reciben a varias familias pero a cada una se la atiende desde su singularidad. “El nido es señal de pertenencia, una barrera protectora”, cuenta la Dra Ana María Menéndez “su alma mater. La prestigiosa profesional al frente de este lugar que como pocos que brinda contención a los chiquitos y un efectivo seguimiento especializado a cargo de un equipo multidisciplinario. El Nido cuenta con siete salas especialmente preparadas para los tratamientos: Fonoaudiología, Kinesiología, Estimulación Temprana, Musicoterapia, Terapia Ocupacional, Taller de sociabilización y Psicología. Además, lo rodea una plaza y hay una sala de espera, donde los niños juegan cuando llegan y antes de irse pero lo que hacen allí también forma parte de su tratamiento
Un estudio realizado por UNICEF revela que “la prematurez es la primera causa de muerte en Argentina en bebés menores de un año, fallecen más de 4500 prematuros cada año”, señala el informe y a su vez precisa que “unos 7 mil bebés vienen al mundo con menos de 2.500 gramos y antes de las 37 semanas de gestación”. Sin embargo en San Isidro desde la llegada de la democracia hasta nuestros días, gracias a un sostenido programa de salud pública y su especial celo en la atención y control de los recién nacidos de alto riesgo, se logró el constante descenso de los índices de mortalidad infantil.
Lo cierto es que los esfuerzos por mejorar la atención perinatal lograron disminuir la mortalidad en los recién nacidos prematuros, llevándola a ser el índice más bajo de los 13 municipios que integran la Región Sanitaria V en esa cauística. La Tasa de Mortalidad Infantil (TMI) viene en franco descenso, año a año y todo ello se debe los controles del embarazo, la atención del parto y del recién nacido, la infraestructura hospitalaria y el posterior seguimiento. Una tarea increíble realizada desde el querible hospital público y que ahora hace centro en Beccar.
Es que allí abrió sus puertas el Centro de Desarrollo Infantil y Estimulación Temprana “El Nido”. “El compromiso del Municipio con los chicos ha sido cada vez mayor y lo que comenzó con un programa de seguimiento de Recién Nacidos en Alto Riesgo fue creciendo –cuenta la Dra. Ana María Menéndez, responsable del flamante Centro al tiempo que explicó cómo surgió la necesidad de “contar con un espacio propio donde se puedan hacer las evaluaciones del desarrollo, como por ejemplo, el test de Bayley y poder brindar a su vez, una atención centralizada para que los padres no anden deambulando por todas partes”.
Durante el relanzamiento del Centro bajo el nombre de “El Nido” y con una madrina de lujo como Karina Mazzoco en este lugar dedicado al niño elegido por UNICEF como centro de referencia en Zona Norte, habrá un espectáculo infantil a cargo de los protagonistas de “Vale hacer Lío”, Valeria Britos y Lionel Campoy, con la dirección de Cecilia Dopazo. Se trata de un divertido show teatral para toda la familia con nuevas versiones de las inolvidables canciones de María Elena Walsh.
ACERCA DE “EL NIDO”
El eje central de este Centro es implementar la detección y atención personalizada de los trastornos del desarrollo infantil generando un plan de tratamiento individual asesorado por un equipo interdisciplinario, formado por estimuladoras tempranas, fonoaudiólogas, kinesiólogas, psicólogos, terapistas ocupacionales, musicoterapeutas y trabajadoras sociales.
“El objetivo es considerar al niño desde su singularidad como parte de un todo, articulando con la familia, la salud, la educación, el deporte, la cultura y la comunidad”, explicó la Dra. Ana María Menéndez, responsable del Centro.
Luego de cumplir con el desafío de alcanzar una muy baja mortalidad infantil, ha sido la preocupación del Municipio la atención de estos niños, que después de haber sido sometidos a costosos y complejos tratamientos en la Unidad Neonatal , requieren de seguimiento especializado a largo plazo con un equipo multidisciplinario.
Se entiende por Estimulación Temprana al conjunto de técnicas y actividades con fundamento científico que se emplea en niños/as de cero a seis años con el objeto de desarrollar al máximo sus potencialidades psicofísicas.
Este Centro cuenta con una sala para la atención de los más pequeños, estimulación temprana, un sector para patologías motoras, uno para integración sensorial, musicoterapia, taller de juegos y/o tareas grupales, consultorios para la atención personalizada en fonoaudiología, psicología, un aula para capacitación y docencia. Se integra al Nido la plaza lindera lo que permite realizar tratamientos en contacto directo con la naturaleza.
Comenzó a atender el 4 de Octubre del año pasado y a la fecha ingresaron 320 niños, y se brindan aproximadamente 2.500 prestaciones por mes. El Centro, que depende de la secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, está a cargo de la doctora Ana María Menéndez. Más de 25 profesionales trabajan en el lugar.
¿POR QUÉ EL NIDO?
“Si repasamos el concepto de hábitat como el lugar donde viven las diferentes poblaciones y dentro de él hay casas o nidos ocupados por distintas comunidades, observamos que el nido es señal de pertenencia, una barrera protectora”, cuenta la Dra Menéndez.
Y ciertamente, los recién nacidos han dejado el útero, en el cual vivían rodeados por las paredes uterinas que le sirvieron de apoyo y contención para los movimientos fetales, seguridad que al nacer se pierde, pues por presentar distintas patologías son colocados en la incubadora donde deben enfrentar las agresiones ambientales continuas de los tratamientos indispensables para vivir.
“Por eso pensamos en el Centro de Desarrollo Infantil y Estimulación Temprana como un nido –confía Ana María-, un lugar que ofrezca refugio, alojamiento cómodo, un hogar, señal de pertenencia para cada uno con su singularidad”.
Un detalle más, este Nido que ha encontrado buen cobijo en San Isidro ha sido ambientado por el artista plástico Patricio Forrester.