Empujando Juntos.Rugby Sin Fronteras, Encuentro por la Paz en La Habana; “Un pequeño paso, un gran salto”
17/1/2017. Nadie recordaba cuando sonó por última vez el himno de Estados Unidos en La Habana, Cuba. ¿El motivo? un encuentro histórico de Rugby Sin Fronteras, que unió a cubanos y estadounidenses utilizando el deporte como herramienta de encuentro y superación. Un apasionante partido de rugby seguido de un tercer tiempo donde los protagonistas fueron la hermandad y el respeto, espialo en esta nota!
En la previa ya se dilucidaba que Rugby Sin Fronteras estaba ante un nuevo evento histórico. “Era un partido con el que soñábamos hace mucho tiempo”, expresaba Gustavo Zerbino, sobreviviente del Milagro de los Andes y vicepresidente de una Fundación que no conoce de imposibles.
La cita era en el Combinado Deportivo “Eduardo Savory”. Allí se encontrarían los jugadores de Estados Unidos, de Cuba y los representantes de Rugby Sin Fronteras. La jornada dio inicio con un emocionante desfile de los equipos, acompañados por sus banderas de ceremonia y el himno nacional del país anfitrión, seguido del himno de EE.UU., el cuál no se recordaba cuando se había escuchado por última vez.
“Estamos ante un nuevo evento deportivo amistoso realizado con el fin de incrementar las relaciones entre los países y consolidar al deporte como puente de intercambio entre los pueblos”, confió el presidente de la Federación Cubana de Rugby, Erick Gutiérrez Rodríguez, en el acto inaugural que contó con la presencia de autoridades del Instituto Nacional de Deporte, Educación Física y Recreación (INDER), del Comité Olímpico y de las Embajadas de Estados Unidos y Uruguay.
“A partir de la apertura entre ambos países vimos una excelente oportunidad para seguir construyendo el mensaje de utilizar el rugby como herramienta de encuentro y unión, demostrando que a través del deporte se pueden superar todo tipo de barreras políticas e ideológicas”, expresó Juan Bautista Segonds, presidente y fundador de Rugby Sin Fronteras.
Juntos empujaron por la paz y el respeto