A los 73 años. Murió por un coronavirus fulminante el periodista Mauro Viale, dueño de un estilo único, sagaz e innovador

11/4/2021. No pocas crónicas de despedida del reconocido periodista daban cuenta que un paro cardíaco terminó imprevistamente el domingo último por la noche con la vida del de Mauro Viale, de 73 años, una de las figuras de los medios audiovisuales argentinos desde hace más de medio siglo, quien estaba internado desde el sábado 10 por coronavirus que le generó una neumonía bilateral, seguida de trombosis. El periodista, cuyo verdadero nombre era Mauricio Goldfarb, se encontraba en el porteño Sanatorio Los Arcos donde pasó por salas de terapia intensiva e intermedia por una leve mejoría previa a su deceso y había recibido el jueves pasado la primera dosis de la vacuna Sinopharm, la de origen chino.

 

De acuerdo a lo informado por la señal de cable A 24 donde encabezaba distintos ciclos de actualidad, tuvo fiebre y empezó a mostrar otros síntomas propios de la Covid-19, por lo que ayer fue alojado en la clínica del barrio porteño de Palermo.

Pese a detectársele una neumonía bilateral y haber permanecido en la sala de terapia intensiva durante el sábado, la tarde había sido devuelto a una sala de intermedia por una mejora aunque sus pulmones seguían comprometidos.

“Te vas a poner bien porque sos un toro. Gracias por los mensajes de amor y fuerza. Los necesitamos mucho”, posteó entonces en redes sociales  su hijo el talentoso comunicador Jonatan Viale quien heredó la profesión de su padre.

La noticia de su fallecimiento fue confirmada por Rolando Graña durante la edición de GPS. “Lamentablemente me toca dar la peor de las noticias que tuve que dar hoy y es que ha muerto Mauro Viale. Nuestro amigo, colega. Muchos años de trabajar con él. A veces, para nosotros dar una noticia no es solamente dar una noticia. Hoy estuve hablando con Jonatan (Viale, su hijo) temprano y me dijo que había mejorado, que estaba saturando mejor. Sin embargo, en las últimas horas se ve que algo pasó. Y Mauro, nuestro querido Mauro, con quien hemos compartidos tantos programas, tantas horas, tantas coberturas, tantos móviles, tantas discusiones en cámara y fuera de cámara, se nos fue”, dijo el periodista antes de pedirle disculpas al público y pedir una pausa.

Viale se había mostrado feliz de haber sido inoculado contra el COVID-19 y lo había hecho saber en el canal de noticias que lo tenía contratado como una de sus principales figuras. “Hoy fui a vacunarme y lo primero que hicieron fue tomarme la temperatura. A mí me avisaron que podía llegar a darme fiebre. Están meta llamarme para preguntarme si tuve fiebre porque es muy peligroso que la vacuna actúe con ese efecto secundario. No tengo fiebre”, había dicho.

Lo cierto es que, al confirmarse la noticia de que había contraído la enfermedad, el infectólogo Javier Farina explicó cómo era la situación de los vacunados. “En realidad, si (Viale) empezó con síntomas hoy y se vacunó hace 48 horas, lo más probable es que el contagio haya sido antes de la vacuna, porque el período de incubación rara vez es menor a los dos días. Pero desde que uno se vacuna hasta que la inmunidad empiece a responder, no pasan menos de 14 días. Y hay que recordar que, igualmente, a pesar de estar vacunado con una o dos dosis y esperar ese tiempo, ninguna vacuna es cien por ciento eficaz para prevenir infecciones”, había explicado el médico.

La trayectoria de Viale reconoció no pocos hitos mediáticos, primero como la voz del fútbol argentino a nivel local (desde 1977 y siendo el relator principal del staff de “Fútbol de Primera” entre Agosto de 1985 y Junio de 1989 en la pantalla de la TV estatal) y también narrando los partidos de la Selección en los Mundiales.  En los ’80 hizo una dupla imbatible con Enrique Macaya Márquez. Su voz está en la memoria de todos los futboleros de fines del siglo XX. Con un estilo propio, con información y una amplia cultura que no se limitaba al típico relato del partido.

La notable capacidad de trabajo de Viale le permitió incursionar en medios gráficos, talk show televisivos, informativos de actualidad, de internet y radiales, entre ellos, la gerencia de noticias y un ciclo matinal en Radio Rivadavia, “RH Positivo” donde supo brillar con sus reportajes políticos y primicias junto a Rolando Hanglin y Mario Mactas. 

Después de dejar el fútbol, Viale se metió con todo en el periodismo de actualidad. Condujo “La mañana” y “La tarde” por ATC. Siempre mantuvo su estilo llano y frontal, del que llama las cosas por su nombre, lo que le valió amigos y enemigos, admiradores y detractores. A él jamás le importaron las críticas. Su slogan era “Digan de mi lo que quieran y yo le digo a cualquiera lo que se me canta”.

El año ’96 fue un período que marcó una época televisiva. Guillermo Coppola había sido detenido en una causa por drogas por la que fue sobreseído y que finalizó con el juez, su secretario y los investigadores condenados. Entonces, Mauro comenzó a traer a su programa a distintas personas vinculadas al caso del “jarrón” y llegó a marcar 30 puntos de rating al mediodía en lo que sería el inicio de los ‘talk shows’ de tevé, formato que por esos años empezaba a asomar y donde cada entrega deparaba una disputa entre los invitados.

Además, su estilo capaz de combinar el olfato periodístico con cierto gusto por el show y casos policiales para cuyo tratamiento incluía dramatizaciones, lo volcó en otros programas vespertinos similares: “Anochecer con Mauro Viale” (1993 y 1995) y “La tarde con Mauro Viale” (1994).

Esa tendencia la profundizó desde Agosto de 1996 con “Mediodía con Mauro”, que al año siguiente pasó de ATC a América.

 Pivoteando luego entre América y Canal 9 (a cargo del empresario de medios Daniel Hadad), marcó su impronta en “Impacto a las 12”, “Indomables”, “Implacables” y “Fiebre de Mauro por la Noche”, espacios donde protagonizó una pelea en vivo con el empresario de la carne Alberto Samid (en enero de 2002).

Durante la primera década del nuevo siglo y afincado exclusivamente en América, estuvo al frente de “El Diario de la Tarde”, “Mauro de Remate” y “Edición Extra: Deportes”, –además animó “Historias Impactantes” (entre 2006 y 2010 en Canal 26) y “Los Especiales de Mauro Viale”.

Los últimos años lo tendrían en espacios entre las dos emisoras de América, la de aire y la de cable A 24, se puso al hombro “Político” (2010-2013), “Mauro Viale 120” (2011), “Mauro 360” (en dúplex en 2012-2013), “Mauro, la Pura Verdad” (2013) “A24 a las 18” (2014-2018) y dos espacios en los que continuaba hasta el presente: “Polémica en el bar” (en América desde 2017) y “Más que noticias” (en A24 desde 2019).

Aunque en la televisión tenía fama de persona dura, Mauro era un hombre de familia. Casado con Leonor, había cumplido 48 años de matrimonio. Con ella tuvo a Ivana, quien decidió ser psicóloga como su madre y productora de los programas de su padre, y a Jonathan, periodista como él. Como padre era muy protector de sus hijos y estaba muy orgulloso de ellos. “Son dos pibes bárbaros, solidarios, buenos amigos, muy queridos por todos”, decía.

Buen amigo de sus amigos, todos ellos recordaban que Viale había sido un muy buen jugador de fútbol y que se destacaba en el medio campo. Entre sus más cercanos se contaba el ex presidente Carlos Menem. “Lo adoro y él a mí, hablamos hasta tres veces por semana. Mantenemos la amistad desde la época en que era gobernador”, contaba sobre el ex presidente recientemente desaparecido.

Los primeros días de Febrero, Mauro había sido entrevistado por su hijo Jony en el programa Pan y circo. En un momento, hablando de las muertes de Maradona, MenemLeopoldo Jacinto Luque, aseguró que estas pérdidas lo ponían “en un lugar tremendo”. “Me hacen pensar en cuánto dura un instante. Un soplo y se terminó la vida”, dijo entonces. Parecía sólo una frase, aunque hoy daría la sensación de que fue una premonición.