La muerte de Alejandro Cohn: Condenaron a tres médicos del Hospital de San Isidro por homicidio culposo

27/6/2024. Se trata de Marcelo Toro Solano, a cargo de la ambulancia que lo asistió en la vía pública, y Ana María Sánchez y Carla Setti, responsables de la Guardia. Recibieron penas de entre 1 y 3 años e inhabilitación para ejercer la profesión. Asimismo otros seis profesionales imputados fueron absueltos. El veredicto se leyó cerca de las 11 en los Tribunales de San Isidro. La magistrada consideró a los médicos penalmente responsables del delito de “homicidio culposo”. Mariano Cohn, hermano de la víctima, escuchó la sentencia desde las primeras filas de la sala y al salir de Tribunales declaró: “Se comprobó que a mi hermano lo mataron en la Guardia del Hospital Central de San Isidro” Y más adelante remarcó: “Si tengo que poner en contexto de lo que suele suceder en estos casos, hay tres médicos que no van a poder ejercer la medicina, uno que va a ir preso y todo esto que pone en evidencia lo que sucede en este hospital”. En ese sentido, sostuvo que este es “un primer paso” en la causa y que no va a terminar con este juicio. “Vamos a pedir que se habrá una causa por encubrimiento a los responsables políticos de quienes dependía el hospital: por encubrimiento, falsificación y mal desempeño de funcionario público”, indicó.

 

La Justicia condenó a tres de los seis médicos del Hospital Central de San Isidro acusados de homicidio culposo por la muerte de Alejandro Cohn,  el hermano del cineasta Mariano Cohn, quien falleció en julio de 2015 después de ser asistido en el centro de salud.

El cuerpo de Alejandro Cohn tenía fractura en la clavícula derecha, lesiones en la parrilla costal del lado derecho, luxofractura y separación intervertebral en la zona cervical y lumbar y una escoriación en el cuero cabelludo, lesiones que se comprobaron recién en el Hospital Italiano de la Ciudad de Buenos Aires, donde fue trasladado a pedido de su familia después de comprobar varias inconsistencias durante el tratamiento médico en San Isidro.

 

Los tres médicos a cargo de la Guardia del Central fueron hallados culpables de homicidio culposo. El joven, que en ese momento tenía 35 años, terminó con muerte cerebral por la falta de atención primaria y de un diagnóstico preciso, lo que derivó en un cuadro que empeoró en 48 horas hasta llegar al punto que su familia debió tomar la dura decisión de retirarle la asistencia mecánica respiratoria.

Marcelo Toro Solano, a cargo de la ambulancia que asistió a Cohn cuando se descompensó en la vía pública, y Ana María Sánchez y Carla Setti, las médicas de Guardia que debieron haberlo asistido en los consultorios de guardias, fueron hallados culpables. Toro Solano recibió la pena de tres años y seis meses de prisión y siete años de inhabilitación para ejercer la medicina. Respecto de Sánchez y Setti, ambas recibieron la pena de un año y ocho meses de prisión de ejecución condicional y cinco 5 años de inhabilitación para ejercer la medicina.

“Está clara la participación del médico (por Toro Solano) y su responsabilidad en el hecho. Los 38 minutos que Cohn estuvo bajo sus cuidados y de no atención fueron determinantes para pasar de una situación de código amarillo a código rojo, es decir, una urgencia en una emergencia de mayor gravedad. La no actuación de Toro Solano aumentó el riesgo del paciente”, sentenció el juez.

Además, Toro Solano tendrá prohibido salir del país, fijar domicilio y no permanecer más de 24 horas fuera de allí. Además, deberá asistir al juzgado una vez por mes. El médico, como lo estableció el fallo, no quedará detenido hasta tanto la sentencia quede firme.

Como se dijo el resto de los acusados, María Quiroga, María Seijo, y Martín Montagna, fueron absueltos.

Pese a las condenas dictadas este viernes en el Juzgado Correccional N°4 de San Isidro, Mariano manifestó su descontento con la decisión de la Justicia sobre otros médicos, los cuales considera que estuvieron implicados en la muerte de su hermano. “No estoy de acuerdo con las absoluciones con los jefes de la Guardia, que son responsables médicos y no administrativos”.

Con todo, el cineasta hermano de la víctima señaló: “De a poco vamos a llegar a la verdad, todavía hay muchas preguntas que la justicia y el hospital deben atender, pero hoy la gente sabe quiénes son estos médicos y se van a tener que poner una careta para atender a los pacientes”.

Asimismo, cuestionó la inexistencia de la historia clínica de la víctima, el robo de los libros de Guardia y las imágenes de las cámaras de seguridad de ese día que nunca fueron halladas. “Eso sigue funcionando mal y hay que modificarlo urgente para que no se repita”, remarcó el cineasta.

“Después de nueve años, esta condena no coincide con el sentido común y la búsqueda de la verdad, pero mantengo mi posición y pedido de justicia y verdad”, remató.