Artes Marciales. Aikido en el Club Estrella de Martínez. El deporte para la RESOLUCIÓN PACÍFICA de los conflictos

 

22/5/2023 SEMINARIO INTERNACIONAL DE JO, BOKKEN Y TANTO. El pasado sábado 20 se llevaron a cabo durante toda la jornada una serie de clases abiertas de este milenario arte marcial en Martínez. Fue en el Club Estrella que una vez más montó un gigantesco tatami en su gimnasio central para convertirlo en un Dojo donde distintos senseis enseñaron el manejo de armas como el Jo, que es el bastón del caminante japonés que se transformó en un arma en la época Imperial y el Bokken, que es el reemplazo de la katana realizado en madera para cuidar el cuerpo y no lastimarse. Unos 110 aikidocas de países vecinos y del interior participaron de esta atractiva experiencia que “busca el equilibrio del cuerpo, de la mente y del espíritu”. “En el manejo del Jo y del Bokken es fundamental cuidar al compañero, no lastimarlo, porque de lo contrario mañana no viene a practicar. Es un juego de a dos”, asegura el sensei vecino de Martínez, Roberto Palma titular de la Organización Argentina de Aikido (OAA). Es que este arte marcial cuenta con una filosofía muy particular, ligada a la idea de saber mediar y resolver de manera pacífica diversas situaciones violentas, pero huyendo de la agresividad: “Se trabaja con la idea de solucionar o controlar un conflicto violento desde el pacifismo, desterrando la idea de competición y sobreposición respecto al adversario; es decir, sin buscar el enfrentamiento violento, ni la derrota del atacante”. De hecho el aikido es un deporte no competitivo y para muchos es un arte para la resolución pacífica de conflictos.

 

El aprendizaje del aikido se basa, por lo tanto, en el conocimiento de diversas técnicas de autodefensa que incluyen métodos de posición, de desplazamiento, de caída, de rodamiento, de proyección, de inmovilización y de bloqueo.

Asimismo, su práctica tradicional está integrada por la acción a mano libre; es decir, por la defensa manual en un conflicto de golpes; y también por el trabajo de armas. Son tres los elementos utilizados para esta última modalidad: ‘Jo’, un bastón de madera de 1,20 metros de longitd; ‘Bokken’, una réplica de la katana en madera; y ‘Tanto’, un cuchillo del mismo material que los anteriores. El objetivo de la incorporación de estas armas es “estar preparados para saber cómo reaccionar ante un atacante que puede ir provisto de diferentes elementos en el conflicto”, define el sensei Palma al tiempo que aclara que es una actividad netamente defensiva que practican tanto hombres como mujeres. “El aikidoka hombre mueve todo por el músculo, por la fuerza –precisa-, en cambio la mujer no, utiliza generalmente la del oponente”.

 

Tanto él como Juan La Mónica, presidente del Club Estrella advierten que se trata de una disciplina pacífica que trabaja la mente y el espíritu y abreva en los valores humanos y el respeto por el otro (se practica en parejas). “La mejor técnica de cualquier arte marcial no es la competencia, cuando esto ocurre hay uno que gana y otro que pierde, acá ganan todos. Una de las expresiones más características del aikido es el abrazo. Quien lo practica no busca pelea, aprende a defenderse y trata siempre de encontrar el equilibrio”.

 

Palma define a cada clase como “un recreo, un cable a tierra” para escaparle a la vorágine que a veces impone el día a día. “Dos veces a la semana te tenés que dedicar un tiempo a vos – aconseja– . Acá viene gente de todas las edades y los mayores necesitamos poner el cuerpo en movimiento porque las articulaciones se endurecen y hay que ejercitarlas. Y en eso el aikido es ideal, es bueno para el cuerpo, la mente y el espíritu”.

 

En consecuencia, esta disciplina ofrece frutos a nivel físico y a nivel psicológico. En primer lugar, la práctica del aikido, como la de cualquier otro deporte, conlleva “una evidente mejora de la forma física y de la salud”. A nivel corporal se trabajan la velocidad, el estallido de la fuerza, la elasticidad y la flexibilidad. De igual manera, cabe resaltar la mejora de la psicomotricidad, consecuencia de un gran dominio del cuerpo, al que se le dan recursos para gestionar los movimientos, sumándole agilidad y consiguiendo estar más activo y alerta. En definitiva, se trata de un deporte que contribuye al desbloqueo del cuerpo, logrando la persona un lenguaje corporal más suelto.

 

La Organización Argentina de Aikido (OAA) fue fundada en el año 2003 por el mismísimo Roberto Palma, tiene sus puertas abiertas en Hipólito Yrigoyen 1251, Martínez, pero quienes deseen tomar contacto con ella o empaparse más en el conocimiento de esta disciplina llena de virtudes – quienes la ejercitan refuerzan el control y esto influye positivamente en la autoestima y en la gestión de las emociones, como la ansiedad y el estrés, tan propios de estos tiempos – solo tienen que entrar vía internet a www.aikidoargentina.org “Demás está decir que visiten el Club Estrella, un orgullo para los vecinos de Martínez”, invita el sensei al cierre de la entrevista.