En el Día del Santo Labrador: HOMENAJE A NORBERTO TESTORELLI en la plaza Mitre

14/5/2023. 95 FLORIDOS AÑOS DE UN NOTABLE  E ILUSTRE VECINO Y SUS 15 VIOLETAS. Este lunes 15, a las 15.30 horas, tendrá lugar en la remodelada Plaza Mitre un gesto en memoria del recordado  Norberto José Testorelli, si el inolvidable relojero, a cuya familia los sanisidrenses debemos el tremendamente bello Reloj Floral y cuya vida estuvo enteramente dedicada al bien común. En la ocasión, se plantarán 15 violetas de los Alpes que rememoran los inicios de esa familia que vino desde Suiza junto al busto del exintendente Adrián Beccar Varela. El evento contará con la asistencia del Intendente Gustavo Posse, familiares de Don Norberto, como Teddy Herrera, su primo hermano, hijos nietos y biznietos de Norbeto, Florencia Beccar Varela -nieta de Adrián, el Intendente que convocó a los Testorelli a la construcción del emblemático reloj-, el padre e historiador Pedro Oeyen confesor del ilustre vecino, a los presidentes de las asociaciones histórico culturales que integró San Isidro Tradicional e Hijos y Amigos de San Isidro, Oscar Rebagliati y el historiador Jorge Tirigal, Marta la viuda de Garrido, a los doctores Luis Beccaria y Carlos Secchi, entre otros. “El 15, día de la festividad de nuestro Santo Patrono hay una actividad que es sencilla pero que para muchos sanisidrenses es importantísima –anunció el pasado viernes 13 en el CASI oportunidad del cocktail rememorativo de San Isidro Tradicional, el Intendente Gustavo Posse (ver aparte)- recordar a Norberto Testorelli, un hombre no solamente heredero y continuador de una tradición comercial ligada a nuestro reloj floral sino también la de una persona de bien, preocupada por el bien común, ejemplo de trabajo, sencillez y don de gente que supo ganarse con dedicación y entrega, el aprecio de todos”. Norberto José Testorelli, era hijo de argentinos y nieto de suizos, belgas, ingleses y criollos que se asentaron en San Isidro y por esas casualidades de la vida nació un 15 de Mayo.  Miriam, su hija, que ofreció detalles del evento destacó que para la familia al llegar el 15 “se trataba de las Fiestas Pluspatronales porque era el cumple de papá y además la conmemoración de San Isidro Labrador, el patrono. Este 15 él hubiera cumplido 95 años –contó visiblemente emocionada – y como la remodelada plaza Mitre quedó tan linda, la familia decidió obsequiar esos quince plantines de violetas de los Alpes, especie que evoca el origen suizo de los Testorelli y 15 por San Isidro y papá”. 

Cabe decir que esta ya figura emblemática de San Isidro fue uno de los sucesores de uno de los comercios más antiguos del partido como es la joyería Testorelli. El comercio fue fundado en 1887 por el suizo José Testorelli, quien en 1913 por pedido del entonces intendente Adrián Beccar Varela construyó el actual reloj floral de la Plaza Mitre.

 En 1913 se inauguró el Reloj Floral en la plaza Mitre. El mecanismo desarrollado por Testorelli fue reemplazado por uno electrónico y hoy la vieja máquina está en el Museo Beccar Varela.

ACERCA DEL RECORDADO ILUSTRE VECINO

Norberto José Testorelli, hijo de argentinos y nieto de suizos, belgas, ingleses y criollos, vivió en la misma casa, en 9 de Julio 460.

De chico por su precaria salud a causa del asma vivió semanas postrado en cama por una enfermedad que aún hoy debe controlar.

Hizo sus estudios primarios en el colegio “Martín y Omar” en Av. del Libertador entre 9 de julio y Belgrano, y el bachillerato en el colegio “Carmen Arriola de Marín”, sin faltar un solo día.

En 1945, antes de terminar el nacional fallece tempranamente el padre. Y debió estudiar y atender negocio, aunque esto pudo ser distinto: su padre no quería que él se dedicara a oficio de joyero y relojero ya que, aseguraba, era un trabajo ingrato. Que mejor era que estudiara e ingresara a un banco, que así tendría mejor futuro.

Lo único que aceptó el padre fue que se ocupara de las cobranzas -había muchas ventas en cuenta corriente- los jueves por la tarde, único día libre en el Marín.

Viviendo austeramente y con mucho trabajo salieron adelante, aprendiendo el oficio solo, con mucho ingenio y dedicación.

Norberto Testorelli se casó con una de sus clientas: Susana Abriata. Tuvieron tres hijos, Miriam, Fabián y Gladys

Dentro de las muchas chicas que concurrían al negocio, había una de Boulogne, era Susana Abriata, la quintera, con la que después de un breve noviazgo se casó a los 28 años. De esa unión nacieron tres hijos, Miriam, Fabián y Gladys. Y de Miriam los cinco nietos, de los cuales dos trabajan en la empresa. “Mi madre se fogueó junto a mi padre -sigue Miriam-. Nosotros nacimos y nos criamos entre el sonido de los carillones, los cucús y los colores de las gemas. Vivíamos en el taller, que estaba detrás del local comercial con atención al cliente”, cuenta Miriam, quien es la actual vicepresidenta de la compañía.

Fabián recibió hace ya tiempo la administración total del negocio y Miriam es la vicepresidenta del emporio Testorelli. Es que en lugar de un solo negocio hoy es una empresa con varias sucursales y 40 empleados.

Norberto Testorelli se jubiló a los 66 años, pero siguió trabajando como cuando era joven.

Fue presidente de la Cámara de Comercio e Industria del Partido de San Isidro, durante 15 años fue tesorero de asociación de ex alumnos del colegio Marín, presidente de la Asociación Hijos y Amigos de San Isidro, vicepresidente de Amigos de la Plaza Mitre, integrante de la comisión directiva de San Isidro Tradicional, miembro del Foro de Seguridad de la Seccional 1ª y socio vitalicio de la Biblioteca Popular de San Isidro.

“Mi política y la de mi esposa (ya fallecida Susana también) es no tener ninguna deuda con nadie tanto en lo particular como en lo comercial, política que del mismo modo han seguido mis hijos, y ha sido la meta que nos impusieron en la conducta nuestros propios padres”, expresó el querido Norberto Testorelli.

La Fundación San Isidro para la Educación, las Ciencias y las Artes, hizo entrega en el 2006 -el mismo año en que Norberto y su esposa Susana cumplieron 50 años de casados- del premio “Fundación San Isidro 300 años” al Norberto José Testorelli.

En esa ocasión una gran cantidad de público, entre representantes de entidades intermedias, amigos, familiares y vecinos se dieron cita para acompañarlo. Y allí este vecino ejemplar pronunció un emotivo mensaje que lo pinta de cuerpo entero: “Me siendo muy honrado y me llena de orgullo y satisfacción. Aparte este premio viene enmarcado en los festejos de los 300 años. Creo que es un premio que se lo debo no solamente a mi trayectoria sino a mi esposa y mis hijos, porque sin la participación de ellos no hubiera podido disponer de tiempo para desempeñarme comercialmente o para dedicarme a las instituciones del partido. La verdad que me hace sentir muy emocionado porque veo la adhesión de toda la gente y eso es impresionante”.