13/2/2021. PROTOCOLOS, MISA AL AIRE LIBRE Y EL SENTIDO TRIBUTO DE UN BARRIO A SU VIRGEN. Se sabe, que es una de las fechas más esperadas por la feligresía sanisidrense, el 11 por la tarde, no pocos fieles celebraron la fiesta patronal de Nuestra Señora de Lourdes, allí por los alrededores del templo de Posadas al 300 . En la progresiva vuelta a la presencialidad tras el aislamiento impuesto por la pandemia, la imagen de la Virgen recorrió los alrededores de la parroquia y con protocolos sanitarios se celebró la misa al aire libre.
“Es un barrio con mucha historia para mi familia y todos los años venimos a compartir esta fiesta de la Virgen de Lourdes con los vecinos. Todo se da en un clima familiar y de paz social”, expresó Macarena Posse, con padre y abuelos muy enraizados en ese barrio tan característico. Con el
distanciamiento del caso, el Dr. Andrés Rolón, un nyc (nacido y criado) en Beccar, confió: “Esta parroquia ocupa una parte muy importante en mi vida; aquí me bautice, tomé la comunión, la confirmación, me casé y se bautizaron mis hijos”, dijo emocionado el presidente del Deliberativo local. Estampas de una muestra de fe que se vivió a plena emotividad.
Pese a algunas lloviznas y a la amenaza constante de la tormenta, familias enteras participaron de la ceremonia religiosa al aire libre, que fue presidida por el obispo de San Isidro, Monseñor Oscar Ojea, acompañado por el párroco de la iglesia anfitriona, Padre Oscar Paladini.

Pedro Ruiz, que desde hace 87 años que vive en Beccar, destacó el significado que tiene la parroquia para la localidad. “Nos representa y es un lugar de encuentro para los vecinos.
Todavía recuerdo cuando era una pequeña capilla y ver el progreso que tuvo nos llena de alegría”.