Cumpleaños para el recuerdo con ‘Twist and shout’, Villa Adelina celebró sus 110 años con TREMENDO FIESTÓN

 

28/4/2019. Villa Adelina celebró ayer su 110 aniversario con una gran fiesta gratuita para y de los vecinos en la que participaron familias enteras. Desde las 14 y hasta pasadas las 18, el Paseo de los Inmigrantes fue una invitación para sumarse a la variada propuesta de talleres artísticos, para el cuerpo y el alma, jugar en una gran kermesse y disfrutar de un espectacular cierre con ‘The Shouts’, banda tributo a los incónicos Beatles. “Sin duda es una alegría festejar este aniversario a 110 años de la llegada del primer tren a Villa Adelina, nuestra localidad más joven y que más creció hasta convertirse hoy en un sitio muy elegido para vivir. Festejamos en este parque que es punto de encuentro e integración cotidiano de familias en torno del deporte, el esparcimiento, la cultura”, confió entusiasmado el Intendente Gustavo Posse.

 

Organizada por la Subsecretaría General de Cultura del municipio, la fiesta convocó en el paseo de Luis Piedrabuena y El Indio a más de 5.000 personas, tuvo su gran torta, compartida como corresponde, el canto colectivo y entusiasta del Feliz Cumpleaños y piñatas colgadas de los árboles dejando caer su dulce y esperada carga sobre grandes y chicos.

The Shouts, por cierto,  puso todo sobre el escenario con los mejores temas de los Beatles, el resto de la fiesta no se quedó atrás. De Vuelta Canela con un impecable show musical para la familia a muchísimos talleres que mostraron parte de lo que hace la Casa de la Cultura del barrio durante todo el año.

“La propuesta es fomentar el encuentro con los otros y propiciar el diálogo por medio el arte, en el sentido más amplio. Talleres para transitar por distintas disciplinas y en familia con la idea de ser parte y protagonista. Algo que nos alegra que haya ocurrido, porque el festejo es patrimonio de todos”, contó Eleonora Jaureguiberry, subsecretaria general de Cultura del municipio.

Largas mesas donde jugar con palabras y rimas, aprender trucos de magia y recetas de cocina, una pizarra para animarse al filete porteño y bastidores para dejar correr la creatividad y las pinturas. “Hermoso, venimos todos los años”, comentó Marcela Bacelo, mientras sus hijos, Astor (10) y Tania (6) pintaban mandalas a más no poder en su primera escala de las muchas que vendrían.

No muy lejos, sonaban cuencos entre vecinos entregados a una actividad bioenergética, en el sector Cuerpo y alma, donde también hubo yoga y meditación, Tai chi chuan y otras disciplinas.  “La estamos pasando muy lindo, nos quedamos hasta el final”, aseguró Michel Santiago, mientras le sostenía la bandeja de plástico con las pinturas a su hijo, Tomás (9), que había superado el temor de la hoja en blanco y terminaba su paisaje soleado.

También hubo clowns que provocaron risas durante toda la tarde y una kermesse con los tradicionales juegos de destrezas y premios para todos. “Un cumpleaños mejor que otro, me encanta. Recién salimos de la kermesse y mis hijos ya están con una amiga disfrutando de Vuelta Canela”, comentó Elizabeth Avesani, docente en la escuela secundaria del barrio.

Performances, un ballet folklórico y un show coreográfico fueron además parte de la fiesta, conducida desde el micrófono por Jonathan Vidal y con activa participación en la organización de Susana Mancini, directora de la Casa de Cultura local, y del concejal Pablo Fontanet. El alto gastronómico tuvo fines solidarios con el puesto de la Parroquia San Cayetano, con su parrilla humeante, y el de la Parroquia Nuestra Señora de Luján, con dulces y tortas.

“Impecable organización, nos sentimos muy cuidados, con detalles que el público no ve, pero que el artista agradece. Sabemos que hay mucha gente, la van a pasar lindo, bien arriba”, dijo Fernando Lotito, el John Lennon de The Shouts, elegida en 2005 como la mejor banda tributo de los Beatles de América latina e invitada a importantes festivales en Liverpool.

Con el grupo de saco marrón y pantalón negro, al igual que los fabulosos cinco en el mítico show del 15 de agosto de 1965 en el Shea Stadium de Nueva York, sonaron clásicos como HelpYesterdayAll my loving Twist and shout,  que impulsó a muchos a la pista imaginaria, ahí nomás del escenario, para terminar el cumple a puro baile y con rock and roll del bueno e imperecedero, si los hay.