“GRACIAS FRANCO” El Presidente Mauricio Macri despidió los restos de su padre en el Cementerio Jardín de Paz

 

3/3/2019. “SE VA UNA PERSONA QUE PREDICÓ CON EL EJEMPLO Y EL TRABAJO”. El jefe de Estado Mauricio Macri retornó la Ciudad de Buenos Aires desde San Martín de los Andes, provincia de Neuquén, para asistir a la ceremonia de despedida de los restos de su padre, el empresario Franco Macri realizada en una íntima ceremonia en el conocido cementerio parque Jardín de Paz, en el km 33 de la ruta 8 camino a Pilar. En un escueto discurso el primer mandatario lo despidió con un emotivo: “Gracias, Franco”. En Enero de 2011 el padre del actual presidente, supo conceder una entrevista exclusiva a este medio en oportunidad de la apertura de la joyería Tiffany en el entonces hotel Conrad puntaesteño. Bajo el título ‘MANANTIALES EN FRANCO DESPEGUE’, en una breve pero atractiva entrevista, que reproduciremos en estos días, el empresario contó cómo soñó Terrazas de Manantiales en el Este Uruguayo y se refirió a los piquetes y cortes de rutas con el vecino país que durante la administración Kirchner mantenían en vilo al turismo rioplatense. Afable y sumamente cordial, el creador del Grupo Socma se mostró a sí mismo “como un hacedor”,  un hombre sensible que dejó impresionarse por el entorno. “La puesta de sol de Manantiales llegando a la punta hacia José Ignacio se semeja mucho a la de Solanas con la diferencia que es otro tipo de mar, es Atlántico pleno, océano”, comparó al tiempo que no ocultó su felicidad por que ese verano de 2011 fue el primero sin corte de puentes. “Era hora que se levantaran los piquetes, no tenía ningún sentido –evaluó ese italiano sumamente perspicaz-. Ese bloqueo a un país no iba a cambiar nunca nada, el único perjuicio era para la gente, para el turista argentino que viaja permanentemente a este maravilloso lugar y para el pueblo uruguayo”. Tipo lúcido si los hubo. 

Durante la tarde hubo un estricto protocolo de seguridad y junto a él estuvieron su primo, Ángelo Calcaterra. También estuvo Gianfranco, uno de los hermanos del mandatario y su primo, el Intendente de Vicente López, Jorge Macri. Por otro lado, asistieron Alicia Blanco Villegas, madre del presidente y Mariano y Florencia Macri.

Mauricio Macri fue uno de los pocos que habló en la ceremonia. También se escucharon palabras del empresario Cristiano Ratazzi y de Julio César Crivelli, presidente de la Cámara de la Construcción y amigo de Franco. Fueron casi los únicos empresarios que estuvieron ahí.

“Despedimos a una persona que fue muy generosa con sus amigos y disfruto de la vida hasta el último momento. Gracias Franco”, dijo el mandatario en un breve discurso.

A bordo de un vehículo oficial, el Presidente Mauricio Macri arribó este domingo al cementerio privado Jardín de Paz, ubicado camino a Pilar. Acompañado por su esposa, Juliana Awada, y en el marco de un amplo operativo de custodia, el mandatario se trasladó desde la residencia de Olivos hasta el cementerio privado.

No hubo presencia de funcionarios salvo por el vicejefe de Gabinete, el sanisidrense Andrés Ibarra, quien fue gerente de  Socma y tenía un vínculo cercano al empresario. También estuvo el vocero presidencial, Iván Pavlosky. Y Anita, la histórica secretaria de Franco que hoy asiste al Presidente. No faltó tampoco la última pareja que tuvo el empresario, Nuria Quintela, una mujer muy preparada que supo acompañarlo en los viajes de Franco a China.

En total, hubo unas cuarenta personas, el círculo más cercano e íntimo del empresario y la familia del Presidente.

Llegó cerca de las 14:30 y se fue en helicóptero a la Quinta de Olivos. Tras haber arribado a la Patagonia cerca del mediodía del pasado sábado con el objetivo de descansar el fin de semana largo de Carnaval, el jefe de Estado fue notificado del fallecimiento de su padre, que tenía 88 años.

Franco Macri, que en realidad se llamaba Francesco Raúl Macri fue  un reconocidísimo empresario y ejecutivo italiano nacionalizado argentino  –premio Konex 1988– que supo llevar las riendas del grupo Socma conglomerado que cobró especial dinamismo en la Argentina de los 90, cuando el empresario adquirió la relevancia que lo colocó en el olimpo de los hombres de negocios no solo locales sino rioplatenses, ya que fue la cara visible de no pocos emprendimientos en la vecina orilla y representante de la marca Chery Automobile de origen chino en el Uruguay. Franco nació en Roma, en un hogar de ocho hermanos. Su madre, Lea Lidia Garbini, pertenecía a una familia romana, propietaria de una empresa de transporte público en la zona del Lacio, su padre, Giorgio Macrì, nació en una familia latifundista de Calabria. Era dueño de una empresa constructora, que tenía contratos en Italia y África.​ y estuvo militando en algunos partidos políticos sin éxito.

A los 18 años Macri emigró a la Argentina trayendo consigo a dos de sus hermanos y sin conocer el idioma español. Su padre, Giorgio Macri, ya llevaba viviendo dos años allí,​ Una vez en Buenos Aires, comenzó a trabajar como asistente de un ingeniero civil, también de origen italiano. Apenas tres años de llegado a Buenos Aires, en 1951, fundó una empresa dedicada a la construcción, que luego daría origen a lo que actualmente es Sideco Americana.​

Con el paso de los años, Macri fue estando a cargo de la conducción de diversas organizaciones empresarias como la Unión Argentina de la Construcción, la Cámara Argentina de la Construcción y la Asociación de Fabricantes de Autos.

Macri se casó con las argentinas Alicia Blanco Villegas (1958 – 1980) madre del Presidente Mauricio Macri y Cristina Greffier (1982 – 1986) y tuvo seis hijos: Mauricio, Alejandra, Gianfranco, Mariano y Florencia; perdió a su hija Sandra en 2014,​ tras una larga enfermedad.

Como muchos italianos Franco fue para los suyos un ejemplo de trabajo y esfuerzo, un hacedor pero los últimos años no fueron benévolos con su salud. Ciertamente quienes estaban a su lado aseguran que sobrellevó los típicos problemas de memoria típicos de las personas mayores. “Él era consciente de que se iba y volvía. Además tuvo un derrame interno muy fuerte y un problema en la cadera”, contó el Intendente Jorge Macri concedida al matutino La Nación.

Con todo Franco se resistía a dejar este mundo, algo que corrobora la victoria sobre al menos dos infartos, una hemorragia interna que hace tres años intentó sin éxito llevárselo antes de tiempo y una rotura de cadera a principios de 2018 que lo confinó a un reposo casi permanente.

El relato del Intendente de Vicente López y  sobrino de Franco coincide con los dichos del jefe de Estado semanas atrás, cuando habló sobre el delicado estado de salud de su padre. “Hace un año que no tengo trato consciente con él y en el último que tuve me pidió que le diera una pastillita para sacarlo de acá. Le dije: ‘Papá, no se puede eso’. Ahí me dijo: ‘Pero yo ya terminé, no tengo nada para hacer, mirá, no puedo hacer nada. Dependo de terceros para todo’. Le dije: ‘No puedo papá. No se puede'”.

Franco Macri falleció el sábado por la noche en su casa de Barrio Parque, donde estuvo los últimos meses luego de que su salud empeorara.