La CEA y su primer encuentro con medios. Mons. Ojea: “Vamos a trabajar para que nadie quede excluido y por el diálogo”

 

13/11/2017. El presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) y Obispo de San Isidro monseñor Oscar Ojea, aseguró hoy en rueda de prensa que las prioridades del servicio de la nueva conducción eclesiástica serán “trabajar para que nadie quede excluido” y “contribuir como pastores al diálogo de los argentinos”. También advirtió que el problema de las drogas es la “mayor pobreza del país” y al ser consultado sobre una posible visita del papa Francisco al país, respondió: “Él sabrá cuando será el momento. Nuestra misión es crear las mejores condiciones para esa visita tratando de que se cumpla su magisterio¨. 

Tal como adelantamos hoy a media mañana la nueva cúpula de la Iglesia encabezada por el Obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, se presentó este lunes oficialmente en sociedad, durante una rueda de prensa ofrecida en la sede de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) –Suipacha 1032, CABA-

Allí, el titular de la CEA,  aseguró que las prioridades del servicio de la nueva conducción eclesiástica serán “trabajar para que nadie quede excluido” y “contribuir como pastores al diálogo de los argentinos”. 

El prelado sanisidrense delineó los objetivos pastorales durante una rueda de prensa en la sede episcopal del barrio de Retiro, donde se presentó junto a otros integrantes de la Comisión Ejecutiva de la CEA: el cardenal Mario Aurelio Poli, arzobispo de Buenos Aires y vicepresidente primero, y monseñor Carlos Humberto Malfa, obispo de Chascomús y secretario general. 

Monseñor Marcelo Colombo, obispo de La Rioja y vicepresidente segundo, no pudo estar en la presentación que hizo de los integrantes el vocero del Episcopado, presbítero Jorge Oesterheld. 

“Como toda renovación, la conversión pastoral que iniciamos hacia una Iglesia más misionera, más simple, a veces será lenta o generará resistencias, pero los obispos renovamos el compromiso de responder a ese llamado de Francisco”, puntualizó.

Laudato si’ no es solo una encíclica sobre medio ambiente sino una cultura del cuidado de la vida de todos. Que nadie quede excluido es la meta que nos ponemos como pastores”, sostuvo, y agregó: “Nuestro lugar es de pastores, no de técnicos ni de políticos, desde ahí queremos contribuir al diálogo, junto al pueblo, junto a nuestros hermanos los pobres. La deuda social es enorme”. 

Al ser consultado sobre una posible visita del Papa Francisco al país, el presidente Ojea respondió que el pontífice “está permanentemente invitado” y que el pueblo argentino “desea su presencia”, pero puntualizó: “Él sabrá cuando será el momento”. 

“Nuestra misión es crear las mejores condiciones para esa visita tratando de que se cumpla su magisterio”, agregó.

Ante otra pregunta de los periodistas, monseñor Ojea afirmó que el Episcopado “comparte las aspiraciones del gobierno”, que ha manifestado, en cuanto al objetivo de pobreza cero y unir a los argentinos.

 

NARCOTRÁFICO, JORNADA DE LOS POBRES, REFORMA LABORAL 

Monseñor Ojea aclaró que la Primera Jornada Mundial de los Pobres, que se celebrará el domingo 19 de Noviembre, “no es una colecta, sino la búsqueda de un encuentro, gratuito, con los hermanos más pobres que se acercan muchas veces y de los que tenemos mucho que aprender”. 

En este sentido, el cardenal Poli dijo que el Papa no deja de sorprender con estos gestos, recordó que “los pobres en la Iglesia ocupan el primer lugar por derecho evangélico” y precisó que el objetivo de la jornada del próximo domingo será “pasar un domingo juntos”. 

Monseñor Ojea aseveró que el “narcotráfico ha crecido y está creciendo” en el país, al sostener que “en los barrios es raro que haya un joven que no haya consumido”. 

“No hay que criminalizar ni estigmatizar, hay que crear una red de contención, un espacio donde puedan hablar, salir de sí mismos para encontrarse”, añadió, y dijo que “los hubo y calculo que los habrá” sacerdotes amenazados por las mafias vinculadas al narcotráfico.

El cardenal Poli afirmó que ese es un tema que preocupa, porque quienes trabajan en las villas de emergencia en esta problemática y en los Hogares de Cristo “están muy expuestos” y alertó: “La droga sigue matando a nuestros jóvenes y quitándoles la libertad”. “Éste es un drama al que tenemos que estar atentos todos”, completó.

Al ser consultados sobre la reforma laboral que impulsa el Gobierno, monseñor Ojea sostuvo que “para la doctrina social de la Iglesia el trabajo no es una mercancía sino un ordenador de la vida”, por lo que destacó la necesidad de “conservar los puestos de trabajo y que no se vulneren los derechos laborales“.

El prelado señaló que la Iglesia estará “al lado de estas situaciones” y estimó que la Comisión Ejecutiva de la CEA que preside visitará antes de la Navidad al Presidente Mauricio Macri.