La FUAR y su cena anual en Espacio Márquez. Fundación que ayuda a los jugadores lesionados en el test match diario

 

 

 

2/10/2017. El pasado jueves 28 de Septiembre  tuvo lugar en el salón Márquez del Hipódromo local la gala anual a beneficio de la Fundación Unión Argentina de Rugby, entidad presidida por el sanisidrense Richard “Gato” Handley y secundado en la secretaria por Gabriel  Travaglini . No pocos comensales  -unos 2000 – participaron de este evento solidario, una verdadera fiesta de la gente de rugby, donde todo lo recaudado servirá para financiar las acciones de la entidad que tiene como gran objetivo, seguir mejorando la calidad de vida de los rugbiers  que han sufrido una lesión grave (discapacidad permanente) dentro de un terreno de juego. En la ocasión, se presentaron también las pelotas intervenidas por grandes artistasuno de ellos nada menos que el genial Eugenio Cuttica y también dejó su impronta en la ovalada nuestra Alejandra Grayeb con sus Croquiseros Urbanos, nervio motor de cuenta actividad se realiza por una buena causa -. Las coloridas pelotas serán rematadas en la cena de fin de año del CASI. En el encuentro  también se celebró  el 10mo aniversario de la hazaña del seleccionado nacional en el Mundial 2007 donde se conquistó el tercer puesto. Así que dieron el presente los  PUMAS DE BRONCE por la década de aquella impecable actuación.

La Fundación Unión Argentina de Rugby es la continuidad de la fundación Rugby Amistad que lleva más de 25 años ayudando a los lesionados graves del rugby. La entidad nació a partir de un jugador, Ignacio Rizzi, hoy en día actual gerente de la FUAR, cuando sufrió una lesión en Francia y le brindaron gran soporte en rehabilitación y atención médica.

Esta historia empezó  con este suceso:   un accidente que se convirtió en un impulso inicial, en la creación de un nuevo equipo. “Este es la tercera gala que realizamos para recaudar fondos – explicó el Gato Handley–  a beneficio de los lesionados graves, hoy tenemos 34 y unos 16 nos acompañan en este encuentro que reúne a la gente de rugby. Para mí es un gran orgullo presidir la FUAR y poder con estos encuentros devolver algo de lo que este increíble deporte nos ha dado. Esta es una demostración que el rugby argentino se une en la adversidad y aporta para que estos jugadores tengan una vida mejor”

Handley destacó que se trata de volcar todo el empuje propio de este noble deporte para que los jugadores de rugby “nunca dejen de jugar en la vida, para ello generamos acciones de prevención y ayudamos a los lesionados graves a mejorar su calidad de vida”.

“Los argentinos muchas veces nos quejamos de cosas superfluas –observó–  y estos muchachos todas las mañanas se levantan y tienen que sobrellevar  un test match, es decir deben superarse diariamente, así que es muy meritorio lo que hacen y con la entereza que lo afrontan”.  

PORQUÉ EL JUEGO SIGUE

Lo cierto es que en casi un cuarto de siglo, la FUAR se hizo cargo de cierto padrinazgo de los jugadores que por causa de una lesión durante un partido de rugby quedaron cuadripléjicos o con una discapacidad grave. El lema es “Mejorar su calidad de vida”.

Desde el punto de vista económico, cuando un jugador sufre una lesión de estas características, lo primero que hace la fundación es darle un subsidio “extraordinario” para resolver problemas urgentes, como un tratamiento médico, la compra de un auto adaptado o la reforma de su casa.

Las ayudas que se brindan son las siguientes:

 

  • Asignaciones mensuales para los lesionados.

  • Suministro de ayudas tecnológicas para poder usar la computadora con facilidad.

  • Administrar con eficacia el fondo solidario.

  • Apoyo en la modificación de su hogar para adaptarlo a su nueva vida.

  • Prestamos para autos o camionetas adaptadas para sus traslados.

 

La financiación de la Fundación surge en gran medida de un fondo solidario constituido por lo que aporta todo jugador fichado en la UAR, además  de los recursos que reúnen en donaciones y torneos de golf, cenas y partidos a beneficio.

El otro aspecto en el que trabaja la entidad es el de la integración y la sensibilización del mundo del rugby, una impronta que a la vez busca crear conciencia para prevenir futuras lesiones. La fundación promovió que muchos clubes adaptaran sus instalaciones para personas con movilidad reducida.

Además, los lesionados recorren el país con charlas que buscan crear conciencia en el juego y, desde su experiencia, promueven ajustes en el rugby para hacerlo un deporte lo más seguro posible desde el punto de vista físico. Para entender que la filosofía de la FUAR es estar cerca y en todo lo que puedan necesitar los jugadores lesionados.  Por eso ellos merecen todo el apoyo de la gran familia del Rugby, porque como bien dice Handley esos rugbiers  todos los días juegan su propio test match, superándose en la adversidad y afrontando todos los obstáculos impuestas por nuestra sociedad.