Se realizó en la USI Marín el foro “Dignidad de la persona y pobreza: los desafíos en la Región”

6/7/2017. Como adelantamos organizado por la Universidad de San Isidro ‘Doctor Plácido Marín’ (USI) y el Foro Cívico de San Isidro, se llevó a cabo el encuentro “Dignidad de la persona y pobreza: los desafíos en la Región Metropolitana Norte”, que se desarrolló en el auditorio de la Universidad con el objetivo de indagar sobre las condiciones que generan la pobreza estructural en la región y proponer estrategias de inclusión que reconozcan la dignidad humana.

El objetivo de la actividad fue indagar sobre las condiciones que generan la pobreza estructural en la Región Metropolitana Norte y proponer caminos efectivos para abordar estrategias de inclusión que reconozcan la dignidad de la persona humana.

El rector de la USI, doctor Gualberto Baistrocchi, inauguró el encuentro y dio gracias por “poder ser anfitriones de un día de reflexión sobre la problemática de la pobreza, porque esto tiene que ver con la misión de nuestra universidad. La pobreza nos involucra a todos. Para la USI, hoy es un día de celebración y encuentro”, expresó.

La exposición estuvo a cargo del presbítero Jorge García Cuerva, vicepresidente de Cáritas San Isidro y párroco de Nuestra Señora de La Cava; Mariano Tommasi, profesor del Departamento de Economía de la Universidad de San Andrés y director del Centro de Estudios de Desarrollo Institucional; y Gabriel Castelli, secretario de Niñez, Adolescencia y Familia del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.

Tommasi, economista y especialista en políticas públicas, centró su disertación en la necesidad de comprender a la pobreza como un “fenómeno multidimensional, que requiere de estrategias también multidimensionales y simultáneas para combatirla”. Para Tommassi, “las políticas públicas deben enfocarse en lo más jóvenes, que en los sectores vulnerables constituyen el grueso de la pirámide poblacional. Por ejemplo, la tasa de escolaridad en los jóvenes de entre 15 y 17 años es de sólo el 60%. Allí es donde existe mayor vulnerabilidad hacia las problemáticas sociales”. 

Castelli, por su parte, puso el eje en “que la Argentina debe dejar atrás la mirada de corto plazo para centrarse en la puesta en marcha de un plan nacional de políticas públicas aglutinante, pensado a 20 y 30 años”. Para el funcionario, exdirector de Cáritas, “la transformación es posible si se invierten las acciones y políticas que se realizaron en los últimos 30 años, y que llevaron a esta situación. Sólo con políticas orientadas al largo plazo se va a poder corregir esta realidad”. Considera que “se hace cada vez más necesario lograr una articulación efectiva entre los distintos niveles de la administración pública -nacional, provincial y municipal-, las Organizaciones No Gubernamentales y las organizaciones barriales”. 

Por último, el padre García Cuerva afirmó que “la palabra que sirve para describir qué es la pobreza en la Región Metropolitana Norte es inequidad. Como dijo el Papa Francisco, la inequidad es la causa de todos los males sociales. Hoy, el pobre está excluido, desechado, es un sobrante. Es nuestra responsabilidad enfrentar el miedo que anestesia frente al sufrimiento ajeno, y que al final nos hace crueles”, afirmó.

El sacerdote, a cargo de la parroquia de La Cava, propuso pasar de la lógica de “construir muros a la de construir puentes”, y explicó que “los muros de ladrillos encierran a unos y destierran a otros. Pero también tenemos muros culturales, económicos y psicológicos. Es necesario que pasemos a un proyecto de puentes, que se proponga conseguir el desarrollo humano integral, fomentar el diálogo y aprender a escuchar a los pobres. Las políticas públicas deben estructurarse con los pobres y no hacia o para los pobres, insertándolos en verdaderos proyectos de vida”, afirmó García Cuerva