VIVIENDA DIGNA. Microcréditos solidarios: la respuesta para terminar la vivienda

Caja-229/2/2016. Esta Ong, dependiente de la Fundación Sagrada Familia, con sede en Boulogne,  nació hace 37 años con un objetivo muy claro: que las familias tengan una vivienda digna y un hábitat adecuado para crecer y desarrollarse.  Para lograr esta meta contamos con distintas líneas de acción, a través de las cuales más de 10.000 familias accedieron a una solución habitacional. Una de nuestras propuestas  consiste en Microcréditos solidarios para el mejoramiento de la vivienda.

El surgimiento del microcrédito

“Otorgamos microcréditos con garantía solidaria a familias que quieran mejorar o construir su vivienda. Trabajamos en la zona norte del conurbano bonaerense.”, explica Laura Sánchez Ferreira,  socióloga y asesora de Microcréditos de la sede de Boulogne.

Este concepto de pequeños préstamos lo tomamos, 20 años atrás, de un referente extranjero: Muhammad YunusÉl es el creador de esta modalidad de ayuda para individuos con pocos recursos, pero con iniciativa para progresar.

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En una visita a la ciudad de Jobra, Bangladesh, notó que las mujeres del pueblo debían pedir dinero a usureros para poder comprar bambú, la materia prima de los productos que realizaban. Al devolver el préstamo, perdían casi todo lo obtenido con su trabajo. Fue en ese momento cuando Yunus  tuvo esa idea fundamental que cambió el paradigma económico de la época: brindar créditos solidarios sin garantías y con mínimos requisitos.  Su prueba piloto fue con un grupo de 42 emprendedores a los que les prestó un total de 27 dólares, que fueron devueltos en tiempo y forma.

Tras un trabajo de varios años, en 1983 Yunus fundó el Banco Grameen (“Banco del Pueblo”). Una de las principales modalidades de esta gestión es la “formación voluntaria de pequeños grupos de cinco personas para promocionar garantías de grupo, moralmente vinculados mutuamente en lugar de la garantía requerida por los bancos tradicionales”, explica su página oficial.

En Vivienda Digna, el funcionamiento de la línea de acción es similar pero los créditos se destinan a la casa propia.  “Una familia que quiere construir o mejorar su vivienda se une a otras dos familias que ellos elijan y forman un grupo solidario que implica que cada uno es co-garante del otro”, detalla Laura.

¿Qué sucede con los microcréditos en Argentina?

En nuestro país, existen distintos organismos dedicados a brindar pequeños préstamos. La Red de Instituciones de Microcrédito (RADIM) nuclea a muchos de ellos.  Allí estamos presentes  junto a diversas entidades dedicadas a las microfinanzas. A nivel nacional, el Ministerio de Desarrollo Social también cuenta con diversos programas para fomentar la actividad.

 

Sin embargo, no todas las instituciones están vinculadas con la vivienda. Al momento de pensar en una casa las personas se dirigen a grandes prestamistas. Según el sitio Chequeado.com, “en el país, la mayor cantidad de los préstamos hipotecarios corresponden a instituciones estatales o con fondos públicos”

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En cambio, en Vivienda Digna, nuestra labor surge como una respuesta para aquellos individuos que no pueden embarcarse en grandes pedidos de dinero pero que desean mejorar su vivienda. Con nuestros Microcréditos pueden transformar, poco a poco, su casa en el lugar que siempre soñaron.  Además,  “tenemos el asesoramiento gratuito de un arquitecto. Es decir, cada vez que la familia saca el préstamo tiene la visita de un profesional a domicilio que le hace un informe: ya sea un cómputo de materiales, un presupuesto, un plano, lo que necesite esa familia para poder seguir avanzando de una manera efectiva”, explica la asesora.

Estos cambios no sólo generan una mejora en la calidad de vida de las familias. En nuestra última evaluación detectamos que el valor constructivo del programa da un valor de referencia promedio de cinco puntos. Esto significa que, con las construcciones, el destinatario quintuplica el valor de su mejora en comparación con el costo que tuvo por realizarlo.