Secretos del buen beber. La experta en cepajes, Marina Beltrame de la Escuela Argentina de Sommeliers propuso recorrer en Bocas, LA RUTA DEL VINO

 

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marina bocas26/9/2015. El vino se toma, se bebe, se disfruta, es una experiencia gourmet, una bebida que se integra y se asimila a la cultura de la buena mesa. Muchas de las figuras de la señal el gourmet.com han recalado este fin de semana en la expo Bocas Abiertas  – Del Barco Centenera y el río, Bajo de San Isidro- para deleite de los vecinos. Una de ellas es la reconocida sommelier Marina Beltrame que propone un divertido y relajado wine tour ahí nomás del Plata para conocer, en la Patria del Malbec, todo sobre cepajes, aromas, sabores, colores y texturas. Mirá el video!

 

 

 

Ella revolucionó el mundo del vino. Un buen día un huésped de una importante cadena hotelera, Georges Sabaté le regaló una beca para estudiar en Francia y llegar a ser sommelier en la École de Métiers de la Table, luego se convertiría en la primera maestra del vino en nuestro país. Todo gracias al consejo de una tía muy intuitiva que le recomendó abandonar el mundo de la hotelería y dedicarse de lleno a aquello que la apasionaba: “si te encanta el vino, ¿por qué no hacés algo con eso?, le propuso. Por estos días, Marina Beltrame la directora de la Escuela Argentina de Sommeliers (EAS) recaló en Bocas Abiertas con todos sus conocimientos sobre tintos y blancos, antes de salir de copas.

 

 

 

“Cada vez se sabe más de vino, y la gente exige cosas que antes no exigía” –cuenta Marina Beltrame, directora de la Escuela Argentina de Sommeliers y vecina de la zona que montó una concurridísima carpa en Bocas Abiertas que propone adentrarse en el mundo del vino. “Hoy se sabe mucho más y Bocas Abiertas es un evento que se espera y eso es haber hecho bien las cosas”, apunta Marina que ya va por su segunda temporada en esta atractiva movida gourmet, ahí nomás del río. “Desde la Escuela Argentina de Sommeliers proponemos que la gente que se acerque a nuestra carpa realice una cata guiada en la que descubra mucho de variedades, zonas, estilos de vino. La idea no es abrumarlos con información sino que el visitante pase un lindo momento”, confía

 

SABER O NO SABER

 

Se sabe, que en los últimos años el interés de los argentinos por el vino ha ido en aumento.  Proliferan vinotecas, wine bars, se popularizaron los cursos de cata, irrumpen en el mercado nuevas bodegas boutique, ha crecido el número de revistas especializadas y de salones y los anaqueles de las librerías acumulan novedades sobre el tema. El mundo del vino interesa, cautiva. Saber o no saber, esa es la cuestión,  diría un Shakespeare de estos tiempos. Conocer de vinos es, para muchos, una razón fundamental.

 

Eso es fácilmente comprobable al recorrer la reciente edición de Bocas 2015 en el Centro Municipal de Exposiciones del Bajo San Isidro. Allí –aunque en las dos primeras jornadas campeó un tiempo algo inestable y poco benévolo para salir y recorrer- en la carpa de la EAS se arremolinaba la gente y reinaba el buen clima.

 

 

“Nosotros armamos un recorrido que se diferencia por estilo de vino y en él resulta bastante claro reconocer las diferencias, por ejemplo, entre un Malbec y un Cabernet –explica Marina-. Los visitantes pueden no haber hecho nunca una cata dirigida y reconocerlos de un modo notable. Con lo cual me parece que como propuesta es atractiva, la gente viene un rato a pasarla bien y prueba muy buenos vinos, que ese es el gran punto”.

 

 

Cómo se educa el paladar para empezar a detectar las notas de cada varietal es otra cuestión. “Ese trabajo debería realizarse en otro ámbito –admite la especialista- . Pero lo que sí permite esta actividad es conocer características muy generales de las uvas o algún detalle en concreto de una crianza en particular, o reconocer si un vino tuvo más guarda o no. Hay algunos detalles en el vino que son bien contundentes y marcan las diferencias entre ellos”, indica.

 

MAESTRA EN VINOS

 

Para esta maestra de vinos, participar de esta experiencia que muestra todo el potencial del polo gastronómico sanisidrense y llevar el bagaje de su escuela y su conocimiento, resulta edificante en sí misma. “Como consumidora, si bien tengo la EAS en Capital, vivo en Zona Norte y mis hijos van al Colegio San Juan, que tiene acá nomás su campo de deportes, así es que convoqué a muchisimos amigos a que conozcan este evento único en su tipo”, dice al tiempo que cuenta que su hijo que la acompañaba en la muestra estaba más que feliz. “Qué bueno má Bocas Abiertas queda al lado del colegio”.

 

En ese ámbito amigable, vivíble, ideal para compartir en familia un buen momento al aire libre. Marina y su escuela el año pasado armó un espacio para chicos con actividades en donde se les daban a probar jugos con materia colorante. “Les tapábamos los ojos y debían adivinar de qué se trataba. Todo no entra por los ojos –destaca Marina- . Fue súper lindo, vinieron un montón de chicos y para ellos resultó una divertida experiencia para los sentidos”, dice esta mujer que confiesa que el solo hecho de ser parte de Bocas, es un verdadero placer. “Es una propuesta bárbara para familias, ojalá nos toque buen clima”, arriesga.

 

 

Y al ser consultada sobre el éxito del Malbec argentino en el mundo y si no avizoraba nuevos logros con otros cortes, aconsejó: “El Malbec tiene un enorme potencial todavía, es una gran carta de presentación para la vitivinicultura argentina, debemos seguir por ese lado. La puerta de ingreso al mundo de los vinos sigue siendo el Malbec, dueño de una uva de tremenda personalidad y un carácter muy definido”, concluye esta pionera, formadora de sommeliers y una precursora en el arte del buen beber.

 

 

El stand de la EAS en Bocas Abiertas -Del Barco Centenera y el río, Bajo de San Isidro- atiende todos los mediodías de 12 a 15.30  y a partir de las 18.30 hasta el cierre a las 23

 

+ data sobre Marina Beltrame y la Escuela Argentina de Sommeliers visitando la página www.sommeliers.com.ar o vía mail a info@sommliers.com.ar