San Isidro, 1er Municipio que apela a esta interesante práctica psicoanalítica. Grupos Multi. Auge de las terapias cortas familiares

 

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gesto mande2/7/2015. Ansiedad, violencia intrafamiliar, adicciones, jóvenes en riesgo, disputas parentales, encuentran una más rápida y efectiva resolución desde la práctica psicoanalítica en la dinámica de los grupos multifamiliares. “Con esta práctica se evitan una cantidad de situaciones de violencia familiar, adicciones y conflictos entre vecinos. Es una tarea que tal vez no se ve, poco difundida por los medios masivos de comunicación, pero que tiene que ver con cómo evitar que esos casos luego engrosen las crónicas policiales o bien situaciones de salud serias”, explica el lic. Arturo Flier, secretario de Integración Comunitaria de San Isidro a poco de presentar el libro del profesor y licenciado en Psicología, Eduardo Mandelbaum: “Teoría y Práctica del Grupo Multifamiliar”, un apasionante volumen de fácil lectura que reúne experiencias de 3600 sesiones abordadas por el lic. Mandelbaum, un discípulo del  Dr. Jorge García Badaracco –eminencia en el tema-, recopilados en hospitales de salud mental y públicos que ponen en blanco sobre negro las beneficios de esta práctica que recurre a la modalidad de trabajo grupal con varias familias donde la tarea del terapeuta reside en desarmar los modos vinculares patógenos de cada grupo, utilizando para ello el contexto multifamiliar como catalizador de los procesos que se busca fomentar. Mandelbaum fue convocando hace años atrás por el Municipio para trabajar sobre conductas adolescentes vandálicas que se daban en el partido. “Ese fue el disparador, la propuesta que presentó Eduardo era viable, había que hacer una prueba piloto y hoy esta dinámica forma parte del servicio que se presta desde la secretaría Salud y de Integración Comunitaria para el abordaje de distintas problemáticas familiares”, describió el Intendente Gustavo Posse.  “Con esta terapia se genera una dinámica muy alta de cura” –precisa Flier e indica: “Hay algo que Eduardo no dice por pudor, pero que es importante destacar: desde San Isidro esta experiencia es señera en otras partes del mundo, como España e Italia y es tema de análisis en congresos de salud mental y psicoanalíticos internacionales”. Conocé en un breve pantallazo de qué trata la terapia de grupos multifamiliares, dónde puede practicarse gratuitamente y en qué lugares encontrar el libro de este prestigioso psicoanalista. No te pierdas los videos!

 

Ayer, al mediodía, el director del programa Grupo Multifamiliar en San Isidro, Eduardo Mandelbaum, presentó su nuevo libro “Teoría y Práctica del Grupo Multifamiliar”, en el despacho del Intendente Gustavo Posse.

 

Allí, ante un auditorio donde no faltaban colegas y especialistas en Salud Mental que trabajan en distintos hospitales públicos y privados, el autor develó algunas de las puntas de este volumen editado por Paidós que recopila experiencias de 3.600 sesiones y le demandó seis años de arduo trabajo.

 

sala

“Se ve en la obra el fruto de muchísimos años de esfuerzo por parte del lic Eduardo Mandelbaum. El libro, si bien no puede mostrar todo, seguramente muestra una parte del trabajo de todos estos años en la práctica psicoanalítica realizada por este valioso profesional no sólo en San Isidro sino en otros ámbitos”, deslizó el Intendente Posse al presentar al autor. Y acotó: “A nosotros nos enorgullece haber adoptado esta disciplina, que busca tratar, desde adentro, diversas problemáticas que hay en las comunidades. Nos pone contentos colaborar con un programa que atiende el conflicto social mulifamiliar, en todos sus aspectos. Siempre con el objetivo de buscar hacer foco en lo humano y en una sociedad más justa e inclusiva”.

 

LO PROVECHOSO DE INVOLUCRAR A OTRAS FAMILIAS

 

2 (3)Ya entrando en tema el Lic. Mandelbaum explicó que hace años atrás junto al Dr. García Badaracco –con quien desarrolló esta práctica en clínicas de salud mental- se reunieron con pacientes en el Hospital Borda y “nos dimos cuenta que ellos cambiaban extraordinariamente con la participación de sus familias en las terapias. A partir de ahí, advertimos que el sujeto es mucho más fácil de tratar si lo vinculamos con el contexto inmediato que es la familia. Esto –claro está- también lo saben los profesionales que realizan terapias familiares –razonó-, lo novedoso fue involucrar en la práctica psicoanalítica a otras familias. No es lo mismo cuando un padre le habla a otro, que cuando un terapeuta lo hace”, ejemplificó.

 

GENTE DESPACHO

A su vez, describió que otro fenómeno apasionante de la psicoterapia multifamiliar parte de la visión que se tiene del otro en esos grupos. “Es que en una familia lo único que los hijos saben del padre es cómo fue y cómo es pero no alcanzan a tener de él una visión como persona total, con su historia, sus problemas, sus deseos –detalló-. Siempre se tiene una visión recortada que está armada del vínculo directo con ellos, pero en los grupos multifamiliares una de las cosas entusiasmantes y motivadoras es que esos padres pueden surgir como personas”.

 

 

En los Grupos Multi esos padres aparecen con sus historias y realidades con lo cual la visión de los chicos cambia absolutamente. “Eso lo pudimos ver con adolescentes delincuentes que aplicamos esta estrategia en el Hospital Alvear. Ellos salían de esos brotes delincuenciales con una sesión de terapia multifamiliar por semana y un seguimiento posterior de dos años”, indicó dando testimonio de la eficacia de esta práctica en el corto plazo.

 

 

El Grupo Multifamiliar consiste en la reunión de varias familias intercambiando vivencias, experiencias, sufrimientos y esperanzas, ayudados por uno o varios coordinadores en la búsqueda del alivio y mejoría de lo que cada una de las personas y sus familias considera su “problema”.  Está comprobado que cuando las experiencias dramáticas se comparten con otras familias, se logran desarrollar estrategias de superación de conflictos que alivian y permiten mejorar la calidad de vida”, aseguró.

 

 

Jugando las piezas del ajedrez familiar dentro del contexto de la comunidad terapéutica se resolvían los problemas y advertían en el intercambio con otras familias por dónde pasaban los cambios que debían hacerse para superar el conflicto.

 

 

DONDE MUEREN LAS PALABRAS, VALE EL JUEGO DE ROL

 

La técnica parte de la premisa de convocar a las familias. “Lo cual no quiere decir que esta acuda a la terapia por algo elemental – admite Mandelbaum- si el conflicto está en la familia, es muy difícil que ésta se sume al ser convocada”. Pero al provechar la riqueza del psicoánalisis en toda su dimensión, se pueden incorporar todos los recursos posibles, entre ellas el juego de rol, que es una derivación del psicodrama y puede resultar muy útil. “Cuando la palabra no funciona y existe un conflicto estancado apelar al role play es una salida”, soltó. Y a renglón seguido pasó a relatar una situación de psicodrama familiar entre suegra y nuera que tuvo una efectiva resolución sin necesidad de que todos los actores participen de la sesión.

 

 

Luego pasó a contar que en el trabajo con poblaciones vulnerables lo preocupa sobremanera, lo que se denomina “afanisis de la salud”, en buen romance falta de búsqueda y de soluciones para salir adelante. “Eso es grave, la gente cree que esa vida desgraciada es todo lo que puede tener –graficó-. Aunque mejoren las condiciones económicas, están como encerrados con una convicción negativa de su propia existencia, es como una condición del imaginario social”. Estas situaciones pueden darse en pacientes más allá de que residan o no en poblaciones vulnerables.

 

“Si uno puede trabajar con esa familia y empezar a redescubrir lo que eso significa es que se convoca a otros miembros, punto uno. Y aunque no acudan todos los integrantes pueden lograrse cambios, punto dos”, plantea

 

LA MULTI-INTERVECIÓN Y EL COMPROMISO CON EL OTRO

 

El profesional relata que en las villas existe un tipo de patología social difícil de abarcar, áspera, donde existen silencios y miedos profundos basados en realidades donde hay muertes y cuenta que puede decir con cierto grado de verificabilidad “que hemos evitado 9 asesinatos y 3 suicidios seguros

 

“Tenia una paciente que sobre el final de la sesión solía decir: ‘Ayer no pude encenderme, pero yo creo que con el alcohol hoy si me voy a poder prender’, todos en el grupo nos quedábamos azorados –confió-. Pero a partir de ahí diseñamos una estrategia para tratamientos agudos de situaciones amenazantes: con las familias y el equipo decidíamos quedarnos en sesión el tiempo necesario para que esa peligrosa contingencia cambie. La multi-intervención lograba que el paciente saliera del lugar de indiferencia y se encamine al cambio. Una vez que la situación relajó y su actitud cambió le di un abrazo y le dije a la chica:  ‘Mirá fulana me pusiste en un dilema; no sabía si internarte en un psiquiátrico o llamar al cuartel de bomberos’. Ella a Dios gracia se río, desdramatizó y seguimos con la terapia”.

 

 

Mandelbaum explicó que hay familias que pueden presentar dificultades en las etapas normales de su evolución y que las mismas pueden acarrear situaciones como el alcoholismo, la depresión, las drogas, la violencia familiar y la delincuencia, entre otras y que una rápida resolución se pueden encontrar en los grupos multi.

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Además confesó que espera que su libro “Teoría y Práctica del Grupo Multifamiliar  pueda convertirse en una suerte de “llamador”  para que muchas familias se acerquen a este tipo de experiencias y aborden la práctica psicoanalítica. “Apelo a que la gente, a través del texto, pueda aprender este tipo de trabajo. El deseo es mejorar la calidad de vida y este es un recurso –añadió-. La Municipalidad de San Isidro cree en su eficacia y por eso no dudó en desarrollar el programa aquí” Al libro se lo puede conseguir en las librerías Marciano y La Boutique del Libro, ambas en San Isidro y en CABA en las librerías  Letra Viva y Paidós

 

 

Flier, a su vez,  contó el programa Grupo Multifamiliar es gratuito y abierto a todos los vecinos. “Desde que comenzamos hemos logrado trabajar con éxito junto a más de 400 familias. Los encuentros son los martes, de 19 a 20.30, en el Club Libanés (Garibaldi 402) y los jueves, mismo horario, en el Merendero del Bajo de San Isidro ( La Ribera y Martín y Omar)”, concluyó.