Con un confuso discurso MICHETTI RESPALDÓ A MONTENEGRO. ¿Al cambio, lo hacemos JUNTOS?

 

al cambio

¿ AL CAMBIO LO HACEMOS JUNTOS? Los globitos que llevan los chicos en sus manos así lo expresan, los dirigentes parecen no estar tan seguros. Michetti y Montenegro, duros con Posse, Atrás quedaron los tiempos en que disertaban juntos, felices y de la mano. Habrá PASO?

amuchados2/6/2015.  El domingo último se llegó al Paseo de Bicicletas, la legisladora de PRO, Gabriela Michetti para apoyar la candidatura a Intendente del actual Ministro de Justicia y Seguridad de la CABA, Guillermo Montenegro. A decir verdad, es la segunda visita en el año de la madrina política del ex juez a San Isidro. La primera fue en Mayo, previa a las PASO de la Ciudad, donde muy bien no le fue. En efecto, perdió días después a manos del jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta. Para muchos el cariz tenso que tomó esa puja por suceder a Macri en la Ciudad, donde Michetti lanzó acusaciones y denuncias poco felices contra su competidor -que en la pasada elección había sido precisamente su jefe de campañale restó en las urnas. Pudo más la tarea del eficiente gestionador que evitó entrar en la confrontación, que el carisma y la vehemencia de la mujer, tal vez dolida por las preferencias de Mauricio por su delfín. En fin, con un estilo muy parecido, Michetti recaló el domingo y fue muy dura con el actual Intendente Gustavo Posse a quien calificó como “un radical que va lamentablemente aliándose con quien en el momento tracciona la mayor cantidad de votos que le convengan”. Lo definió un oportunista, alguien que quiere “conseguir alguna ventaja” dando a entender que por eso se acerca a Macri. Cuestionó sus “mandatos sucesivos” y dijo que “Posse de ninguna manera será parte del PRO”. Gabriela-manos (1)Sus palabras poco tenían que ver con las que pronunció hace escasos dos años atrás cuando llegó de la mano del mismísimo Posse al Auditorium San Isidro a ofrecer una charla acerca de la reforma judicial.  “Estar acá significa las ganas y la iniciativa de trabajar en conjunto por una Argentina diferente. Y hacerlo con quienes compartimos visión, compartimos valores y principios, y sobre todo ese diagnóstico de una Argentina que no nos gusta cómo está. El país está muy confrontado, gastando energía en la pelea y no en la construcción. Gustavo, Guillermo y yo, somos personas que pensamos que lo que nos toca hacer como políticos es tratar de subsanar esto”. Sin duda es difícil construir unidad  desde la confrontación y la mala memoria. La legisladora decía de Posse por entonces que era uno de los intendentes con mejor gestión de la Provincia. También resultó contradictorio de explicar para Michetti, el recelo a las elecciones sucesivas cuando el macrismo acaba de sumar a sus filas a Jesús Cariglino, el peronista multireelecto que se presentaría a un nuevo mandato en Malvinas Argentinas llevando los colores de PRO.

 

 

 

 

Dicen que fue el propio Mauricio Macri quien en varias ocasiones debió actuar como moderador y pedirle a Michetti que baje los decibeles durante la campaña. En la previa, el líder de PRO, sugirió una duelo proselitista sin agravios ni golpes bajos, bien “al estilo PRO“. Pero la carismática Gabriela  le dio un tinte caliente, tenso, con denuncias de hasta un supuesto “uso de fondos públicos” de su rival durante la campaña, sea en inauguraciones, actos proselitistas junto con Mauricio Macri, o cuestionó la red de llamadas telefónicas domiciliarias con las que Rodríguez Larreta se mantuvo en contacto con el electorado.

 

Ese estilo confrontativo más parecido al del peronismo en sus tiempos más turbulentos dispensado para con su antiguo jefe de campaña y al momento competidor, dicen que a Michetti le restó en las urnas para dirimir la puja histórica de PRO por la sucesión de Mauricio Macri. Con un perfil más tranquilo y moderado, Larreta supo aprovechar la vehemencia de su rival y sacar partido de ese clima intempestivo. Después del paso por las urnas en las primarias vendrían las felicitaciones de rigor y el compromiso a “trabajar juntos” en la campaña evitando así rupturas, pero las heridas quedan.

 los dos

La explicación viene a cuento porque Michetti recaló por segunda vez en menos de un mes en San Isidro para respaldar la candidatura de su ahijado político, el actual Ministro de Justicia y Seguridad de la CABA, Guillermo Montenegro. Pero para hacerlo dejó en claro que el Intendente Gustavo Posse no forma parte no forma parte del macrismo, calificándolo a su vez de oportunista. En resumidas cuentas dijo: “Cuando a alguien le va bien (por Macri) aparece la posibilidad de que mucha gente, que no estaba en el proyecto desde el inicio, o que no ha estado formando parte de esto, aparezca a último momento a ver si puede conseguir alguna ventaja”.

Montenegro compartió esa visión y fue aun más contundente, luego de colocar a Posse en un limbo aludiendo que carecía de partido su candidatura a Gobernador, ahora que va por la Intendencia, duda de su pertenencia al espacio . Al consultarlo por unas posibles PASO  deslizó: “Hay gene que no está en el PRO y se está acercando a Mauricio como dicen Gaby en este último tiempo por como está traccionando los votos él. Creo que somos claros de quien es el PRO a nivel nacional y en San Isidro. Es entendible que alguien quiera venir pero hay que ver cuáles son los valores, cuál es su forma de actuar y qué ha hecho en el último tiempo”

Allí Michetti arremetió y fue taxativa: “Posse no es parte del PRO de ninguna manera. En todo caso es un político que forma parte del radicalismo y siempre ha tenido alianzas con distintos sectores con el FPV, nosotros, el Frente Renovador. Es un radical que lamentablemene va aliándose con quien cree que tiene más posibilidad de traccionarle votos”, y agregó, como para que no quepa duda: “No hay ningún acuerdo ni ninguna charla, por eso estamos acá convencidos de que el cambio es Guillermo Montenegro. Posse tiene ya tres mandatos y busca un cuarto, es realmente impresionante que no se dé cuenta de la necesidad de un cambio”. Ambos por cierto parecen tener frágil memoria pues hace menos de dos años, fue el propio Posse el que ofició de anfitrión, les abrió las puertas del Municipio y compartió una charla en el Auditórium sobre la reforma judicial.

 los-tres-pro-abrimos-1

michetti-posse-1-291x300En esos tiempos, no hace mucho, tanto Michetti como Montenegro destacaban la importancia de plantar bandera junto a Posse  y  “formar un frente para recuperar un proyecto de país serio, con los valores y principios que la Argentina necesita”. El intendente reconocía en Gabriela su origen radical y expresaba que “no necesariamente hay que ser del mismo partido político para compartir los valores y principios que necesita el país”, tampoco ocultaba su vocación de conformar ese frente amplio y abarcativo. Y Michetti sería más explícita en aquellas legislativas de 2013 y ya hablaba de la necesidad de dar con un Capriles, que como en Venezuela, aglutinara a todo el arco opositor para producir un cambio.“Es un proceso que tenemos que transitar. En 2013 no habrá un candidato aglutinador porque son legislativas, pero al 2015 no podemos llegar sin un Capriles”, decía. Hoy el discurso parecería ir por carriles distintos, se  habla de apertura pero se ensimisman en fortalecer el PRO puro aún a costa de poder perder en el principal distrito y hasta cierran esa posibilidad de PASO a los propios radicales.  Lo resumió hace pocas horas el concejal Andrés Rolón en el zonal de un matutino: “Lo que están haciendo es endurecer la posición en la Provincia de Buenos Aires, porque tampoco le dan espacio a los radicales. No es clara la supuesta apertura que dice tener el PRO”.”

Es más, el legislador sanisidrense argumentó que “están entrando en una contradicción preocupante, por un lado Macri dice que no quieren peronistas y por el otro Vidal, apunta  a ser como Evita. Gustavo Posse es candidato a Intendente, eso está claro. Si Posse es tan malo, no sirve de nada, no mide nada, ¿por qué todos lo nombran? Si la carrera es tan sencilla, ¿para qué levantan el nombre de Posse?”, dejó picando.

Y para rematar, tiró un palito a quienes hoy buscan disputar en el distrito: “De los personajes que estamos hablando es gente que trabaja en el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Que alguno pueda dormir en San Isidro, no significa que tenga el conocimiento para administrar el distrito. No tenemos problemas con quién competir”.