“San Isidro es Arte” iluminó el salón Victoria Aguirre de CASI. APUESTA CREATIVA QUE ALIMENTÓ EL ALMA

9/12/2014. Del martes 2 al viernes 5 Diciembre, el tradicional salón del Atlético se convirtió en inmejorable atelier mostrando el potencial creativo de arte contemporáneo de pintores y escultores consagrados y emergentes. Con entrada libre y gratuita esta muestra declarada de “interés municipal”, pergeñada por Alejandra Grayeb y Patricio Lutheral sedujo a nuevos públicos y les permitió contemplar desde un ámbito amigable llamativas esculturas, pinturas al óleo, tallas en madera, trabajos en técnicas míxtas, realizados con material reciclado, mosaicos, jardines colgantes verticales y muchas piezas de notable creatividad y valor estético. El titular del legislativo sanisidrense Carlos Castellano concurrió junto con la responsable de CulturaSí, Eleonora Jaureguiberry, a la vernissage y al cierre. En esta entrega, hablan los expositores y Jaureguiberry cuenta cómo será el remate de esta temporada cultural 2014 con la cantata de Villancicos a cargo de la Orquesta Escuela del Bajo Boulogne  y las actuaciones estelares del tenor Darío Volonté y la mezzosoprano Vera Cirkovic junto a un Coro de 50 personas en el atrio de la Catedral. Enterate y mirá los videos!

“Todo lo que se haga de movida cultural en Zona Norte hay que valorarlo porque sacar un poco el foco del centro de Buenos Aires como la meca de todo y traerlo a San Isidro es muy importante. Hay muchísima gente ávida de arte y está bueno que haya más espacios””, desliza la artista Claudia García Moritán durante la vernissage de “San Isidro es Arte”, una feliz iniciativa de Alejandra Grayeb y Patricio Lutheral que inundó por espacio de tres días el recoleto salón Victoria Aguirre de CASI con un venero de obras de arte.

Escultura, pintura al óleo, tallas en madera, trabajos en técnicas míxtas, con material reciclado, mosaicos, jardines colgantes verticales y muchas piezas de notable creatividad y valor estético ganaron los atriles del Atlético San Isidro, del martes 2 al viernes 5 de Diciembre, a total beneficio de la Parroquia Nuestra Señora de la Cava.

“Yo soy socia de CASI desde chica y junto a Patricio Lutheral percibimos que existía un vacío en el club, que faltaba un espacio que reflejara lo hecho por pintores reconocidos de la zona, como Jorge Di Ciervo y Miguel Dávila. Con esos artistas de renombre, convocamos a otros emergentes y armamos esta muestra”, confía la organizadora, Alejandra Grayeb al tiempo que explica que de inmediato su idea de gestar esta original movida cultural en un club tan característico y ligado a la historia de San Isidro, encontró su correlato en la subsecretaria de Cultura y Comunicación de la comuna, Eleonora Jaureguiberry, a la sazón también socia del Atlético.

FORMAR NUEVOS PÚBLICOS Y EDUCAR EL OJO. “Ni bien Alejandra me contó la idea decidimos avalarla de un modo estratégico porque siempre tenemos el anhelo de formar nuevos públicos, que nuevos ojos descubran y se interesen por el arte”, cuenta la gestora cultural, mientras recorre la muestra en compañía del presidente del legislativo local, el Dr. Carlos Castellano.

“Aquí convive la obra de artistas consagrados y emergentes” –destaca Jaureguiberry-  y dice que resulta muy interesante para educar el ojo . “Todo está colgado y exhibido con mucho respeto, de modo que bien el socio del club o los asistentes han podido recorrer este salón colonial -que hoy luce tan cambiado- de un modo amigable, porque ha sido muy bien resuelto el espacio. Es sorprendente ver la sala Victoria Aguirre del CASI, generalmente poblada de mesas y sillas, en este formato tan tentador para quien se entusiasme con conocer el mundo del arte”

A poco de desandar el acceso del CASI, junto a las canchas de tenis, pendiendo de un árbol, la obra “Manto pa’ mi Pacha”, de Magui Rocatagliata derrama el talento de esta artista para trabajar con material reciclado y acapara la atención de Castellano como los jardines colgantes verticales o los “Símbolos Vitales”, realizados en espejos grabados en bajo relieve con los símbolos de la Paz o el Ying y Yang realzados aún más por los  marcos en hierro oxidado surgidos de la inspiración de Titi Quevedo.

La instalación -que alcanzó el medio centenar de obras– brindó un panorama de lo que está pasando en el arte contemporáneo, desde un espacio poco frecuente donde los visitantes –como ocurre en Puertas Abiertas o Arte Espacio– tuvieron la oportunidad de dialogar con los artistas y conocer su historia.

Así, por ejemplo,  pudieron adentrarse en el mundo de Greta Beeh y sus mosaicos, pergeñados con material reciclado y resignificados o con las esculturas en madera de Yanko Kuraja. “Algunas de las piezas que estoy exponiendo fueron hechas con árboles que se cayeron en las últimas tormentas en el casco histórico. Honramos a esos árboles y les damos otro destino”, cuenta Yanko mientras se aprecia un estupendo cuenco y un poco más allá pueden contemplarse los trabajos de María Laura Fortelay, María Cinque, Dolores Fernández Alonso, Teresa Fernández Mouján, Claudia Ferrari, Valentina Cambiasso, Carla Bustamante, Germaine Bonifacio, Héctor Gath, Margarita Mostany, Florencia San Martín, Paula Travaglini, Tony Macedo, Claudia Luccini, Laura Messing o Hernán Alvarez Forn (h), entre otros.

Precisamente, Hernán hijo del conocidísimo “Hormiga Negra”, navegante, escritor y consumado caricaturista por cierto, todo un referente en el Náutico San Isidro y en CASI devela el secreto de sus esculturas: “Mi obra se divide en dos: una relativa a los caballos y los toros, a la que considero la más trascendente y la otra, que brota en mi tiempo de descanso, ese recreo muestra la talla en madera de la mariposa o el alguacil”, define y cuenta que nunca sintió el peso de llevar el nombre del padre.

“Está bueno que el común de la gente conozca las obras de artistas que se formaron acá. Yo pinto desde los 6 años, es una vocación que tal vez heredé de mi madre. Soy, si se quiere, autodidacta”, dice Alvarez Forn y explica que casi de inmediato esos caballos y toros que tienen su génesis en un armazón de metal y luego van cobrando forma, sin prisa pero sin pausa, sedujeron al gran público. Dice que estos eventos permiten tener un mano a mano con el público, les agudizan el ojo y los estimulan a adquirir originales. “Estar rodeado de arte, alimenta el alma”, añade y cuenta que también representan un desafío para los artistas que pueden urdir obras más complejas u otras más simples a pedido de los potenciales compradores. “En el arte hay límites –destaca este escultor con página web y atelier en Manuel Aguirre 638, Bajo de Acassuso, entre Solís y López y Planes –, uno a veces parte de la pauta que le da un interesado y con los elementos que cuenta tiene que desarrollar una obra. Ese es un gran disparador. Un día, por ejemplo, me pidieron hacer un dragón y tenia solo un alambre y un par de elementos; eso aunque no lo creas, implica un desafío y estimula la creatividad”, indica.

“EN SAN ISIDRO EL ARTE SE VIVE Y ES PARA TODOS”, interviene Jaureguiberry y al consultarla sobre si puede ser un rasgo característico y que refleje el positivismo de la incipiente marca ciudad precisa: “Este goce de la ciudad en superficie viene de lejos y arrancó con dos hechos muy importantes, la recuperación de las tres casas con historia: el Museo Pueyrredon, la Quinta Los Ombúes y Villa Ocampo, todas con mucho valor cultural y patrimonial; además de la apertura de la Casa del Juguete. Y por el otro lado, la recuperación del espacio verde”.

La responsable de Cultura señala que la Subsecretaría a su cargo estuvo involucrada en ambos procesos y “verdaderamente fue una fiesta lo del espacio verde porque es el lugar de encuentro de los vecinos. Hoy en todas las plazas hay una explosión de actividades en esos ámbitos al aire libre recuperados para los vecinos. El Sí a las Plazas, que en este momento estamos llevando a cabo, en una suerte de invasión frenética a toda hora y todo el año, tiene que ver con que esos lugares existen y fueron construidos con mucho esfuerzo en estos últimos dos o tres años sobretodo. Obviamente, llevar cultura es el último paso. No hay cultura ni dignidad en un lugar donde no hay cloacas ni salud pública”, observa.

La última plaza reciclada por el Municipio fue la Carlos Gardel y al inaugurarla el Intendente Posse recordó que ése era el espacio donde todos los veranos se reunía la familia a disfrutar del ciclo de cine al aire libre.

Para finalizar la temporada de eventos en este 2014, CulturaSí ha previsto un cierre a todo trapo con la Orquesta Escuela del Bajo Boulogne en el atrio de la Catedral y la actuación estelar del tenor Darío Volonté y la mezzosoprano Vera Cirkovic junto a un Coro de 50 personas “Esa orquesta nace del proyecto de desarrollar agrupaciones musicales infanto-juveniles gestando un proceso de integración, potenciando vocaciones”, reseña Jaureguiberry

Será un inolvidable concierto dedicado a la Natividad. La propuesta invita a cantar a grandes y chicos y porqué no a la familia entera, junto a una orquesta que es símbolo de esfuerzo, trabajo y superación. “Para ellos (por los chicos de la Orquesta Escuela Bajo Boulogne) poder tocar junto a Volanté, en el atrio de la Catedral es un hito en sus vidas”

La funcionaria destaca que los logros alcanzados por esta humilde agrupación dan testimonio de un mérito enorme. “Muchas veces en nuestras propias vidas debemos mensurar no solo a dónde llegamos sino el camino que debimos recorrer para llegar –razona-. Ellos son un emblema del camino recorrido, brindan un espectáculo de mucha calidad, en el espacio público y para todos”

“Es una manera muy interesante de terminar el año y muy metafórica. Este concierto de cierre tiene la virtud de resumir lo que la subsecretaría de Cultura pretende de su gestión: que es brindar eventos de jerarquía en el espacio público que pueda reunir a toda la comunidad”, remata Jaureguiberry.