Conmoción de los dueños de la avioneta. Bonomi y Kern: la aeronave era “segurísima”y la tragedia, “una pesadilla”

28/5/2014. En diálogo con distintos medios el empresario y vecino de la zona, Federico Bonomi (KSK, Herencia y gestor de distintos emprendimientos en Uruguay), dijo que la avioneta que cayó en el Río de la Plata era “segurísima”. Su mujer, la diseñadora Cynthia Kern, visiblemente conmovida, también confió en diálogo con TN que la tragedia “no tiene explicación. Es desgarrador. Es una pesadilla”, desgranó. Bonomi y Kern llegaron esta mañana a Ezeiza. El matrimonio, dueño de Kosiuko, estaba en Miami cuando sucedió la caída de la aeronave.

Kern contó que su marido Federico Bonomi había viajado en la aeronave el jueves pasado. “Era un avión familiar. Es una tragedia que no tiene explicación, las pericias determinarán que pasó. Pero no lo podemos creer. Leo, el piloto, era un tío para mis hijos”, explicó.

.“Leo dejó cuatro hijos”, se lamentó la diseñadora. Y relató: “La ruta la hacemos hace años, yo le tenía miedo a volar y Leo me daba confianza. Además, el avión era altamente seguro. No entendemos qué pasó”.

A su vez, el propietario del bimotor siniestrado en el Río de la Plata, el empresario martinense Federico Bonomi, dijo “no entiendo lo que pasó” y aclaró que el piloto y la maquina eran muy seguros.

Según el dueño de Kosiuko, el piloto trabajaba hace 14 años y contaba con miles de horas de vuelo. En cuanto a las condiciones técnicas del aparato dijo que “es un avión impecable”.

El bimotor caído tiene plazas para diez pasajeros. “Es segurísimo….”, dijo y reiteró: “No entiendo. Puede volar con un solo motor”. El empresario tiene en Carmelo un emprendimiento hotelero y un campo y viajaba habitualmente en vuelo familiar.

La avioneta, modelo Beech Super King Air B200 perteneciente a Bonomi, tiene capacidad para dos tripulantes y una autonomía de vuelo de 3.300 kilómetros. Su valor en el mercado es de aproximadamente 1,5 millón de dolares.

“En el avión estaba Sebastián Vivona que es un amigo, y Leandro Larriera, el piloto que trabajaba hace muchos años con nosotros, por eso estoy preocupadísimo“, sostuvo el empresario Federico Bonomi.

Además, enfatizó: “Debe haber sido algo rarísimo, es un avión nuevo, yo viajo con mi familia todo el tiempo, es de alta confianza, es súper seguro y Leo es un piloto excepcional, muy experimentado, viaja a Estados Unidos todo el tiempo para entrenarse, todos los años”.