CHARLAS DE VERANO. Vecina en Punta del Este. VALERIA MAZZA: “La fama no puede ser nunca el objetivo”

Los Gravier-Mazza disfrutando una tarde de playa en el parador Selenza. Foto: Marcelo Bonjour

20/1/2014. En una nota concedida al matutino uruguayo El País, la vecina de Acassuso, Valeria Mazza cuenta que es “socia vitalicia” del Este. La top model y empresaria habló del desarrollo del balneario, el mundo de la moda y su vida en familia junto al siquense Ale Gravier y los chicos.

Los días de la familia Gravier-Mazza en Punta del Este empiezan con deporte. Siguen con playa y reuniones con amigos. “Todo en un plan muy tranquilo. No somos de los que vamos a todos los eventos. Las vacaciones son para hacer lo que generalmente no haces, entonces, mucho relax“, sintetizó Valeria Mazza, sentada en una reposera del parador Selenza.

La modelo y empresaria confesó que cada año viaja un poco antes a Punta y que toda la familia espera las vacaciones en el balneario porque lo sienten “su lugar”. Si bien afirmó que el balneario crece cada año, se lamenta por lo corta que resulta la temporada.

“Es muy breve, entonces para toda la gente que invierte acá es perjudicial y provoca, por ejemplo, que llegas en diciembre y todavía están clavando, colgando carteles y vos decís: `pero tuvieron todo el año para hacerlo`. Todos los años es lo mismo. Entonces, yo creo que cuesta tener un muy buen servicio porque es algo que se arma por muy poco tiempo”, reflexionó la empresaria ante una cronista del matutino uruguayo El País.

Aunque viene a Punta de vacaciones, Mazza no puede dejar de lado, “del todo“, el trabajo. El sábado presentó la nueva colección de su marca de lentes con un desfile en la playa. A pesar de que asegura no estar dedicada al negocio, sino más bien al diseño de los productos, reconoce que ahora tiene más responsabilidades, trabajo y estrés que cuando era modelo.

“Al estar de este lado tenés mucho más compromiso. Cuando vos sos modelo hacés tu trabajo y te vas. Yo ahora me encargo del desarrollo del producto, la organización del desfile, el casting de las modelos y cuando eso termina tengo que encarar la distribución y venta”, describe.

Su nombre se ha transformado, después de “muchos años de trabajo y varios logros”, en una marca. “Yo hace 23 años que estoy en el mundo de la moda y llevo varios trabajando en esa marca. Hoy en día tengo cuatro perfumes, estoy trabajando en el quinto para lanzar el primer semestre de este año, estoy con los anteojos y tengo una revista digital femenina. Me gusta esta idea de desarrollar cada vez más el concepto de marca”, confiesa.

UN MUNDO CAMBIADO

Según la modelo, la moda y el mundo que la rodea han cambiado, y responsabiliza de ello a las comunicaciones. “Antes, un desfile era muy exclusivo, para poca gente y hoy podés estar en cualquier lugar del mundo mirando un desfile a través de una computadora. Eso ha hecho que los tiempos sean mucho más vertiginosos. Antes, una modelo tenía tiempo de aprender la carrera y, después, de hacer carrera. Hoy pasa todo tan rápido que no tienen ni tiempo de aprender”, analiza.

-Entonces ¿qué le aconsejas a las nuevas modelos?

-Esta es una profesión muy linda, con muchas ventajas y desventajas, como todas. Si tienen la posibilidad de hacerlo, les aconsejo que se la tomen con responsabilidad, disciplina y compromiso. Tienen que escuchar a la gente que las quiere bien, porque siempre son las que le van a decir la verdad, aunque no siempre guste escucharla. Muchas veces se aprende y se crece más diciendo no que diciendo sí.

-¿Cómo aprende una chica a ser modelo?

-Primero tenés que tener determinadas características físicas porque sino no podés empezar. Ahora, si vos las tenés, es importante aprender a conocerte, saber cómo es tu cuerpo, tus virtudes, lo que tenés que ocultar, tenés que saber moverte, caminar. Todo eso lo podés aprender. Y después, tenés que crecer interiormente, porque hay millones de mujeres lindas, hay menor cantidad de modelos, y menor, aún, de modelos que sobresalen. La diferencia para mí está en la personalidad, si querés hacer carrera tenés que saber elegir y, a veces, te vas a equivocar y otras veces no. La diferencia está en la cantidad de aciertos y errores.

-Hoy hay un grado de exposición mayor y un afán por mostrarse cada vez más ¿Cómo lo ves esto?

-Hoy, con eso de mostrar y mostrar se busca la fama como objetivo. Yo creo que la fama es la consecuencia de un trabajo bien hecho. La fama no puede ser nunca un objetivo. Porque si no tengo un fotógrafo, hago cualquier cosa y mañana salgo en una revista. Pero ¿eso quiere decir que sos famoso? No. Hoy se confunde. Creo que en eso también impactaron las comunicaciones. Hoy, todo el mundo muestra su vida y se enteran de la de los demás en las redes sociales. Antes te enterabas de la vida de un famoso si comprabas una revista… eso es lo que ha cambiado mucho la vida de todos.

-¿Te gustaría que tu hija Taína fuera modelo?

-No me disgustaría. Pero… no es algo que decida yo.

LA VISITA AL PAPA Y EL “NO” A TINELLI

Uno de los momentos más emocionante del 2013 para Valeria Mazza fue el encuentro que mantuvo en Roma con el Papa Francisco.

Mazza viajó junto a su marido, el empresario Alejandro Gravier, por trabajo y placer. Si bien ya conocían a Jorge Mario Bergoglio, querían felicitarlo personalmente por el nombramiento. “Estar ahí en la plaza y sentir la emoción de la gente fue muy lindo”, recordó.

Mazza, que se reconoce una ferviente admiradora del Papa Francisco, asegura que tiene un carisma “impresionante” y recuerda exactamente qué les dijo en el momento que les tomó la mano. “Cuando se acercó a nosotros nos agarró de la mano y nos dijo: `quien iba a decir que nos íbamos a ver acá`, porque la última vez nos habíamos cruzado en un avión”, contó.

La rubia dice que quedó pendiente un encuentro con toda la familia, y espera poder concretarlo este año.

FUERA DE AGENDA

Aunque dice que nunca la llamaron para ir a Bailando por un Sueño, el programa de Marcelo Tinelli que este año vuelve al aire, la modelo y empresaria afirma con seguridad que no iría. Y acota que, “en primer lugar,” porque no sabe bailar.

Fuente: Diario El País

Crédito foto: Marcelo Bonjour