RESTAURARON EL HISTÓRICO RELOJ FLORAL. 2014, El Año del Centenario. Actividades SEGÚN PASAN LAS HORAS
23/12/13. Es una de los símbolos más emblemáticos y domina la tradicional Plaza Mitre. Ubicado en el corazón de ese espacio público, el característico reloj floral, réplica del de Edimburgo, el 31 de Diciembre cumplirá 100 años. Los otros días el Intendente Gustavo Posse junto a la familia Testorelli, fiel custodia de esa pieza artesanal tan ligada al acervo sanisidrense, presentó su puesta en valor. El reloj cuenta ahora con nuevo mecanismo eléctrico, reja perimetral y cámaras de seguridad para preservarlo actos de vandalismo. La pieza inaugurada la noche del 31 de Diciembre de 2013, marcó el primer minuto de 2014 y según anunció el Intendente regirá un rico calendario de actividades para el año que se avecina recordando el centenario.
“Estoy muy emocionada, este reloj era uno de los principales desvelos de Norberto”, confió Susana Testorelli, rodeada por sus hijos Fabián y Miriam y sus nietos Ignacio, Juan, Joaquín y Milagros.
La viuda del entrañable joyero, recordó cómo Don Norberto Testorelli – ese vecino comprometido con su pueblo que integraba no pocas entidades intermedias- se ocupaba del mantenimiento de la máquina de esa pieza artesanal al igual que del reloj que se encuentra en la torre de la Catedral. “El mecanismo primitivo era a pesas, no a cuerda como muchos creían, y hoy fue reemplazado por un sistema eléctrico que no requiere de tanto mantenimiento” – explicó Fabián Testorelli, visiblemente emocionado por el encendido de la maquinaria a la que otrora atendía junto a Don Norberto. “Mi papá se encarga de este reloj floral, del de la Catedral y también del que se encuentra en el Colegio San José (Santa Isabel) al que yo concurría”, abundó en detalles.
Lo cierto es que el pasado 19 de Diciembre se reinauguró el reloj floral ubicado en plaza Mitre (avenida Libertador 16.300, San Isidro), luego de su restauración y puesta en valor. A las 13 en punto, el Intendente Gustavo Posse, junto con la familia Testorelli, pusieron nuevamente en marcha el reloj que fue construido por José Testorelli e inaugurado en 1913. “Es un honor estar con los Testorelli en este reloj tan emblemático de San Isidro, que se inauguró hace 100 años. José Testorelli fue el impulsor del proyecto y su familia siempre se ocupó del mantenimiento”, describió Posse.
“En la medida que el tiempo y la meteorología lo permitan buena parte del calendario de actividades del año próximo se realizará acá, celebrando el centenario del reloj floral”, explicó el Intendente Posse dejando en claro que ese espacio es frecuentemente el lugar de encuentro de la comunidad. “Hoy damos comienzo a los festejos que se extenderán durante todo el año que viene. Esta plaza será remodelada para dejarla exactamente igual a su diseño original”, añadió.
En 1913, José Testorelli, quien había abierto su negocio de relojería en 1887 en el centro de la ciudad, fue convocado por el entonces Intendente de San Isidro, Adrián Beccar Varela, para que emplazara un reloj floral. El jefe Comunal había visto en uno similar en una postal que le enviaron desde Edimburgo (Escocia), por lo que le encargó a Testorelli este proyecto que se realizó ad honorem. El reloj se puso en marcha a la medianoche del 31 de Diciembre de 1913 ante un numeroso grupo de vecinos en la plaza Mitre.
“Entre carros y caballos José Testorelli trajo de la ciudad de Buenos Aires el mecanismo de este reloj, en ese entonces mecánico y la noche de año nuevo del 13, cuando dieron las 12 campanadas, en el primer minuto del 14 se puso en marcha el reloj. Fue una verdadera fiesta: las damas vestidas con miriñaque y los hombres a lo Mitre, lo celebraron mientras la Banda Municipal de San Isidro tocó unos acordes – evocó Jorge Tirigall- El reloj está tan lindo como antes. Fue el primer reloj floral de Sudamérica. La máquina original está en el Museo Beccar Varela”, contó el vecino e historiador Jorge Tirigall.