A pesar del frío UNA MULTITUD reverenció al Santo Patrono en una celebración con eje en la HUMILDAD. SAN ISIDRO, SIEMPRE SAN ISIDRO

15/5/13. A pesar de la ola polar, centenares de vecinos desafiaron el rigor y a las 16, partieron desde el atrio de la Catedral, en una procesión precedida por las imágenes de San Isidro Labrador, y las de su mujer, Santa María de la Cabeza. Junto a ellos caminaron por el casco histórico el obispo, monseñor Ojea, y el párroco de la Catedral, Pedro Oeyen; autoridades locales, como el intendente, Gustavo Posse; y funcionarios del Ejecutivo municipal. En su homilía el pastor de la diócesis puso de relieve la humildad y sencillez de San Isidro y del Santo Padre, Francisco. “Estamos hartos de búsqueda de protagonismos, de búsqueda de poder, sin ningún tipo de principios, de decir la parte de verdad que me conviene, de no aceptar con nobleza la verdad del otro, de nuestra falta de capacidad para escuchar, para dialogar. El mundo está cansado de soberbia, de vanidad, de búsqueda de uno mismo. Por eso los gestos sencillos de nuestro Papa llegan tanto al alma”, reflexionó mons. Ojea en su mensaje. E hizo un llamado a ejercitar la humildad –palabra que deviene de humus, tierra- y la paciencia, en una sociedad caracterizada por mucha vorágine. “Coincido con el Obispo –le confió a CONtinta NORTE, el párroco Pedro Oeyen-, la gente está harta de la soberbia, de la lucha por el poder. Lo importante es que cada uno aporte su humildad, su humanidad”. El Intendente Gustavo Posse destacó que se trataba de una jornada de reflexión, de abrazarse con amigos, de recibir a los nuevos. “Nuestros referentes de idiosincrasia son San Isidro y su mujer, esa familia de un trabajador de la tierra, un agricultor, esa familia humilde es nuestra guía –razonó-. ¿De dónde venimos? Del trabajo, del esfuerzo, de la humildad. No hay que creer en lo del glamour que divulgan las revistas”, expresó. En el interior del templo y en la calle hubo reparto de espigas entre los feligreses. Instantes más tarde en la plaza Mitre los vecinos disfrutaron de la reversionada kermesse, un musical del maestro Oscar Araiz y la proyección en 3D de un mapping multimedia sobre la fachada de la Catedral. ¿El motivo? Los vitraux del templo. Los coloridos vidrios tal vez sueltos no tengan demasiado significado pero en conjunto alcanzan simbolismo y remiten a una historia. Lo que queremos transmitir es el sentido de unión que tenemos los sanisidrenses”, contó la subsecretaria de Cultura y Comunicación, Eleonora Jaureguiberry. “Los vitraux tienen una característica muy peculiar, la luz es la que pinta las cosas, cuando ella no está, es difícil ver, El trabajo en el vitreaux es hacer filtrar la luz a través de los colores para que luzcan –describió el padre Oeyen-. Es un poco el ejemplo de lo que tiene que ser nuestra vida: dejar transparentar la luz de Dios a través de nuestras características peculiares. Dios es como el sol, que ilumina pero podemos agregar nuestro color y hacer que el mundo ande mejor, que sea más lindo”, aconsejó.

 

Los actos centrales por las festividades del Santo Labrador –que vale recordar se extienden durante todo Mayo- suelen convocar a la activa participación de vecinos y feligreses en una conmemoración de características propias con profundos lazos de unidad.  “Es muy importante participar en esta procesión porque es una forma de fomentar valores y de entender que todos juntos podemos compartir y participar en actividades en comunidad”, dijo Fernando Lavignolle, que vino especialmente desde la Ciudad de Buenos Aires a experimentar ese acto de devoción que se reedita todos los 15 de Mayo y que identifica a un pueblo y su gente.

 

 

 

 

 

 

 

 Los participantes que desafiaron el rigor de una térmica polar desandaron las calles céntricas y del casco histórico, realizando paradas muy significativas, en la Intendencia, el mástil, el Colegio Nacional, el Sanatorio San Lucas pidiendo por los funcionarios, las instituciones, la educación, la salud mediante un guión que también contuvo frases del Papa Francisco

 

 

 

 

 

 

 

Tras la procesión, y durante la misa solemne que ofició en la Catedral, monseñor Ojea pronunció una homilía centrada en la figura del Patrono: “San Isidro tiene un patrono laico, de familia pobre, trabajador de la tierra y un verdadero amigo de Dios. Tenía un corazón abierto y sensible. Junto a su esposa, llevó una vida ejemplar para la humanización del mundo”, afirmó el Obispo, quien hizo una oración por la salud, la educación, la justicia y el trabajo.

HUMILDAD QUE HUMANIZA. A poco de iniciar su mensaje el pastor de la Diócesis rescató la humildad de San Isidro y los comparó con los gestos de sencillez del Papa Francisco. “Señor que en la humildad y en la sencillez de San Isidro nos dejaste un ejemplo de vida escondida en Cristo –observó– Estamos saturados de soberbia, el mundo en el que vivimos está saturado de soberbia. No se puede entender de otra manera la llegada de los gestos de Francisco, el Papa. Gestos de cercanía, de sencillez, gestos tan comprensibles. Y sin embargo, el mundo está azorado por esta revelación de la sencillez, casi diría de la naturalidad, en algunos casos”.

“Nosotros hoy le pedimos a nuestro santo patrono que nos contagie de esa humildad y de esa sencillez para llevar una vida escondida en Cristo, que en definida significa vivir nuestra verdad en el seno de la iglesia. Vivir nuestra vocación. Vivir con amor nuestro lugar. Amar nuestro lugar. Amar nuestro espacio. Amar nuestro tiempo. No apresurarnos siempre como para querer tragarnos la vida sin masticarla”, expresó el prelado e invitó a ejercitar la humildad y vivir “al ritmo de la tierra. “La oración sencilla con la que encabezamos la Misa nos dice una cosa sorprendente, nos dice “concédenos que el trabajo de cada día humanice nuestro mundo”. Le pedimos a San Isidro que nuestro trabajo, que siempre es con el sudor de la frente, no nos sea tanto con el sudor del corazón, no sea un trabajo a expensas de perder vínculos humanos fundamentales, sino que el trabajo nos lleve a poder desarrollar esos vínculos, a poder buscar espacios gratuitos, para poder vivir aquellas relaciones que son esenciales en nuestra vida. Como las vivió San Isidro, las relaciones familiares, las relaciones de amistad. En nuestro caso, las relaciones entre vecinos”, graficó.

 

Finalizada la misa, pasadas las 18, la gente colmó la plaza Mitre, donde se desarrolló una variada kermesse. Saltimbanquis, cantantes, actores y músicos representaron a los santos patronos, mientras entregaban estampas y entonaban cánticos líricos. Aunque la noche caía, el cielo se iluminó con las antorchas que portaban acróbatas mientras otros artistas callejeros bailaban sobre el escenario central y se unían a la gente que los acompañaba en sus danzas.

 

 

 

 

 

 

“Es importante que las fiestas patronales continúen con el paso de los años y que, manteniendo las tradiciones, se incluyan en los festejos nuevas actividades que renueven el espíritu de estas celebraciones“, afirmó Posse. “Este festejo no es sólo para los católicos, sino una ocasión para que celebre todo el Municipio”.

 MAPPING MULTIMEDIA, UN ESPECTÁCULO ÚNICO De entre lo nuevo, se destacó una proyección de imágenes en 3D (mapping) sobre la fachada de la Catedral, a cargo de Carolina Travi. Vitrales del templo e imágenes de San Isidro Labrador se reflejaron en el frente de la iglesia.

 

 

 

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El guión completo se basó en una idea de Oscar Araiz, fundador y director del Ballet del Teatro San Martín y director de los Ballets del Teatro Colón, del Grand Théâtre de Ginebra, del Teatro Argentino de La Plata y el Ballet de Bolsillo, su propia compañía Independiente. “La obra arranca con un rescate a la tradición, de hecho el pregón habla de los cabezudos, de las fiestas antiguas, de la inundación en el bajo, de las épocas oscuras de la dictadura hasta el día de hoy. Pero existe una mano que da, abraza y cuida a la comunidad”, detalló la subsecretaria de Comunicación y Cultura Eleonora Jaureguiberry visiblemente feliz porque los sanisidrenses desafiaron al frío y se llegaron a la plaza para contemplar un espectáculo único.

La música fue compuesta por Sebastián Verea, quien tocó en vivo. “La obra hecha por Carolina es patrimonio de San Isidro”, explicó Eleonora al tiempo que describió que sobre el frente de la Catedral pudieron verse imágenes de los vitraux. “Los coloridos vidrios tal vez sueltos no tengan demasiado significado pero en conjunto alcanzan simbolismo y remiten a una historia. Lo que queremos transmitir es el sentido de unión que tenemos los sanisidrenses”, contó la subsecretaria. “Las figuras van generando sentido”, acotó y al rato puntualizó: “Si las fiestas no incorporan lo contemporáneo y lo suman a la tradición no viven; inclusive la fiesta de San Isidro Labrador, en Madrid que es gigantesca y dura una semana,  tiene espacio para un sinfín de expresiones, si no están todos, no es la fiesta del pueblo”, define.

Lo cierto es que el mapping multimedia representó un desafío no sólo creativo sino también en materia de iluminación pues hubo que sortear la contaminación lumínica propia de toda urbe, aunque ciertamente el área de preservación en la que está inmerso el templo, resolvió en parte estos problemas y la belleza de la plaza Mitre con sus centenarias tipas, le dio aún mayor belleza y logra intimidad

 La sutil y potente proyección de animación conceptual y jugó con las texturas y las líneas neogóticas de la fachada teniendo en cuenta sus contornos y relieves, en los que se proyectaron los recursos de animación  Lo novedoso de este caso es que a través de las imágenes se imprimió un mensaje muy nuestro recurriendo a todos los recursos de video y sonido disponibles.

“Decidimos hacer esta proyección para demostrar que somos un distrito con mucha historia pero también con un presente y un futuro muy pujante con el uso de tecnología y de los nuevos medios artísticos digitales para seguir con los festejos”, expresó Jaureguiberry.

Oscar Araiz y el titiritero Tito Loréfice dirigieron la performance de bailarines y objetos; y el músico Sebastián Verea tocó música en vivo compuesta especialmente para la ocasión.

Lo tradicional llegó a su punto cúlmine con la narración de Graciela Deza de un conmovedor “Pregón de San Isidro”.

En el ambiente se percibía alegría, emoción, y un sentimiento comunitario: “Vengo con mi familia porque acá es una tradición y me gustaría que mis hijos adquieran esta costumbre”, afirmó Claudia Guerrero, de San Isidro.

La vecina Josefina Vallecillos, que disfrutaba del espectáculo junto a sus tres hijos, comentó: “Mis chicos esperan todo el año la kermesse de San Isidro Labrador, porque disfrutan de los juegos y de la comida”.