Londres 2012. PERFILES: Pareto recordó el gran revuelo que causó su Bronce 2008. “Llegué de Pekín, me tomé el tren y me fui a la facu”, evocó la tigrense

26/7/12. En un mano a mano con Olé “La Peque”, Paula Pareto hoy con 26 años, memoró la repercusión de su bronce 2008 en yudo y cómo volvió a la realidad. Cuenta en qué deporte es mejor: ¡El fútbol! “Me sale más fácil que el judo”. Juega seguido, en cancha de 7, de defensora. Como buena fana xeneise quiere foto con Riquelme

 

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Si sorprendés a tu país con una medalla impensada. Si te elogian de Usuhaia a La Quiaca. Si muchos que ni te conocían ahora te llaman por tu apodo. Si los medios se pelean por hacerte una entrevista, si… ¿Nada cambió? “A mí sólo me cambió que hay gente que me conoce y me saluda. Después seguí haciendo mi vida desde el primer día. Si llegué, me tomé el tren y me fui a la facu…”. Lo que cuenta Paula Pareto es literal. La Peque, como pasó a ser para todos desde ese día que en Pekín emocionó hasta a los que se siguen confundiendo el judo con el taekwondo y el karate, no lo cuenta como un mérito. Sólo la sencillez de una chica deportista que quiere ser médica por más bronce le cuelgue del cuello.

 

-¿Pero es tal cual, fuiste ese mismo día a la facu?

-Llegué de Pekín por la mañana y se me fue pasando un poco el tiempo porque no estaba acostumbrada a que me recibieran con entrevistas. Había una revolución. Entonces, se me hizo tarde. Pasé a comer por lo de mi abuela y así como estaba, sin bañarme y con la ropa de los Juegos, me tomé el tren para la facu. Era una materia nueva y no podía seguir faltando. Y cuando me reconocieron, algunos me empezaron a sacar fotos. Pensé que ya había pasado todo, pero…

 

-Pero la camperita de los Juegos te delató.

-Ja, nunca más la llevé. Entramos a clase y la profesora, antes de empezar, dice: “Acá está la chica de los Juegos”, y empezaron a aplaudir todos. Fue la primera vez que todos en un lugar me aplaudían a mí.

 

-¿Y te acostumbraste a esa fama?

-El tema es que soy muy vergonzosa. Encima, un par de días después volvía para Tigre en el tren y una señora se me acerca y me dice: “Te felicito porque ganaste la medalla para nuestro pueblo y ademas sos de acá”. Le agredecí y pensé que se había terminado la historia. De repente, levanta la voz para todo el vagón: “Un aplauso para nuestra vecina que ganó una medalla olímpica”. Me puse colorada y toda la gente aplaudía y yo veía que las puertas no se abrían más. Aparte, si salía corriendo quedaba como una maleducada. Y si me quedaba, no sabía qué hacer.

 

-Las rivales también te conocen más, te estudian más.

-Y te analizan más la forma de luchar. Crean antídotos para lo que hacés. Eso ya lo sabía desde el momento que gané la medalla.

 

-¿Cuánto presiona que haya más miradas en vos?

-No pasa nada con eso. Voy a luchar igual que la vez pasada. Hay un cambio evolutivo de Pekín para acá, como pasó con todos. Más entrenamientos, más torneos, más experiencia. Voy a tratar de ganar la mayor cantidad de luchas, como todas. Con dos victorias ya puedo estar entre las cuatro primeras.

 

-¿Nunca te decís “basta de judo”?

-Pasa a veces, pero me dura una semana y listo. Hay que tratar de disfrutar lo que hacés y hacerlo como en el primer interclubes que participaste.

 

-Lejos quedó la chica que hacía gimnasia deportiva. ¿Tenés facilidad para los deportes? -Hacía gimnasia y otros deportes, pero siempre digo que el deporte que más disfruto y en el que me salen las cosas más fáciles es el…

 

-El judo.

-No, el fútbol. En el judo tengo que trabajar mucho y me termina saliendo, pero a mí me sale más fácil jugar al fútbol.

 

-¿No exagerás? Subiste al podio en los Juegos.

-De repente digo quiero tirar la pelota allá, la tiro y me sale. Me pregunto cómo habré hecho eso y no sé. En el judo practico un montón hasta que me salen y cuando lo logro me pongo muy contenta. Pero el fútbol no lo entreno, no hago nada y de chiquita que tengo esa facilidad. La voy a poner allá y va.

 

-Seguís jugando pero a tu entrenador mucho no le gusta, ¿no?

-Ja, no tengo el aval 100% de él pero juego. Ahora estoy de defensora porque nadie quiere jugar atrás. Igual pateo los tiros libres, los córners. Cancha de 7 en Longchamps, con remera, árbitro y todo. Es mi cable a tierra, es el momento de estar con mis amigas. A la noche no puedo salir porque después estoy muerta toda la semana. Hay que cumplir el horario y estar.

 

-Mucha técnica en el fútbol y, ¿qué virtudes en el judo? Sos buena en…

-Creo que soy rápida en los lances, que es una característica de mi categoría, porque somos livianas. Pero algo clave es el hecho de ir para adelante. Eso me lo dicen entrenadores de otros países. Ganando o perdiendo, siempre para adelante. Te gano por cansancio.

 

-Ya estás en Londres, ¿cómo te pega el costado social?

-Tengo amigos en la delegación, mucha onda con la Selección de básquet, con los chicos de atletismo, con Gaby Best, con Fede Molinari…

 

-¿Y foto con quién te sacás?

-Nunca fui cholula con las fotos. Con el único que quería sacarme era con Riquelme y no fue a Pekín. Encima tenía una foto con él en el celular y una amiga no sé qué hizo con mi teléfono y la perdí.

 

FUENTE: Ole.com.ar