El sábado, en el Colegio Marín hubo un concurrido Seminario sobre Liderazgo. “Formarse para gestar un cambio social”

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15/03/10. Ante un auditorio repleto de asistentes, se escucharon distintas voces sobre un tema excluyente que acaparó la atención de propios y extraños: el liderazgo en este Siglo 21. El intendente Gustavo Posse explicó los distintos tipos de liderazgo político; el Gobernador del Distrito 4825 del Rotary Club, Luis Eduardo Busso evocó a Paul Harris y planteó los nuevos escenarios en el servicio comunitario;  el Dr. Juan Elizalde (Franklin Covey de Argentina)  habó sobre “Los 7 hábitos de la Gente Altamente efectiva”; Juan Carlos Heinze (veterano de guerra de Malvinas) se explayó en el “Liderazgo ante la adversidad”; y la doctora María Fernanda Nuevo de Posse enfocó el compromiso en el liderazgo apelando a un rol mas sensible que racional para saber escuchar al otro y detectar sus necesidades.  El Obispo de la Diócesis fue al hueso. Casaretto habló del gran desafió que se presenta en este Bicentenario: encarar las asignaturas pendientes como la pobreza y la exclusión social. “900.000 jóvenes –contabilizó preocupado  no estudian ni trabajan. Este es el problema real, el más serio de la Argentina. Tenemos una hipoteca social fuertísima”, dijo.

 

 

 

 

 

En una jornada sabatina plena de sol no pocos rotarios del distrito 4825, empresarios de la zona y representantes de ONGs que trabajan estrechamente con la comunidad, se llegaron hasta el salón ubicado en el primer piso del Colegio Carmen Arriola de Marín. Es que en ese cálido claustro, se desarrollaba el interesante “Seminario Distrital de Liderazgo”, preparado por el Rotary Club Victoria.

 

 

 

 

viglione“Hemos abierto este ciclo que generalmente desarrollamos con la familia rotaria a  la comunidad porque creemos que hablar de liderazgo y del nuevo paradigma de liderazgo en el Siglo 21 era en estos tiempos mas que interesante”, confiaba a poco de iniciar su diálogo con Continta Norte la titular de la entidad rotaria anfitriona, Silvia Viglione.

 

 

 

NO UN LIDER DE MASAS, SINO QUIEN PROCURE EL BIEN

 

Viglione explicaba que se deben reconceptualizar lo que son los liderazgos nuevos y observó que esta es una temática que entusiasma mucho a los jóvenes. “Tengo mucha esperanza en ellos –observó- . Si bien no han vivido los liderazgos del Siglo 20 están en condiciones de ver otro tipo de liderazgo. Ya en las empresas se percibe que quienes las conducen son altamente participativos, no se puede no escuchar, captar las necesidades del otro a través de la empatía, la responsabilidad social que llevan adelante de a poco va a ir cambiando el concepto de líder. No va a ser el que mueve masas sino aquel que piensa hacer bien a los demás”, razonó.

 

La presidenta reconoció un fuerte compromiso por parte de los municipios de la zona y destacó la tarea que se cumple en San Isidro y San Fernando, comunas que cuentan con distintos proyectos y ONGs (en San isidro por caso trabajan mas de 600 entidades) que se ocupan de promover el bien común.

 

 

 

EL LEGADO DE PAUL HARRIS

 

 

El Gobernador rotario, Luis Eduardo Busso, advirtió que las dotes de liderazgo hay que saber desarrollarlas porque tienen sus técnicas y destacó que resulta vital en la tarea humanitaria que tiene el Rotary  que los rotarios sean líderes en sus clubes y lo desarrollen en su actividad para que puedan liderar en el servicio.

 

“Abrimos  este ciclo a la comunidad para que las empresas que tienen sus programas de responsabilidad social empresaria entiendan que ese es nuestro espíritu también y que les podemos brindar alguna herramienta para desarrollar mejor su actividad social”, confió al tiempo que evocó la tarea que cumpliera el fundador, Paul Harris allá por 1905.

 

“Entonces tampoco eran épocas fáciles –memoró– Harris se reunió con cuatro amigos y en tiempos difíciles en los que se sentían mal y abandonados, crearon no sin esfuerzo esta gran institución.  Ese  fue un líder con mayúscula.  Nosotros seguimos sus pasos, Paul Harris siempre decía:  ‘Yo no soy un genio, soy un hombre común con una idea genial”. Y ese es el mensaje en cuanto a liderazgo en Rotary: somos hombres comunes pero tal vez tenemos alguna idea genial en algún momento”.

 

 

 

 

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Busso reveló que la entidad que comenzó en 1905 casi como un pequeño grupo de autoayuda  ha cosechado a lo largo de los años no pocos logros. “Hicimos muchas cosas buenas, esta institución –por ejemplo-  está a punto de terminar con la polio en el mundo y ha alcanzado un sitial en Naciones Unidas por el trabajo que cumple  en la resolución de conflictos. Desde los grandes temas de la humanidad hasta el problema de una persona en nuestra comunidad son atendidas por Rotary Internacional. Desde conseguir una máquina braille para que un niñito con problemas visuales pueda estudiar hasta ocuparse del cambio climático, la polio o la paz en el mundo. Tan vasta y apasionante  es la tarea de los rotarios y para eso debemos capacitarnos; a esto apuntan los Seminarios”, recalcó.

 

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El pulso del encuentro lo llevó el locutor y periodista rotario Fernando Di Maio, quien presentó a cada una de las personalidades del panel. Silvia Viglione fue la encargada de dar la bienvenida ante una mesa de notables integrada por el propio Busso, el intendente Gustavo Posse, el director general del Grupo Educativo Marín, Dr. Gustavo Mangisch, el Pass International President, Luis Vicente Giay y el Pass Gobernador, Mario Burcheri.

 

Hubo recordatorios especiales entonces para los Dres. Gustavo Mangisch y Gustavo Posse, el primero por haber cedido las instalaciones y al jefe comunal por su reiterado apoyo a las actividades.

 

 

DEL LIDERAZGO MACHIAVELLIANO POR ACRECENTAR PODER AL DEL CONSENSO SOCIAL

 

 

Las palabras de Posse fueron las que dejaron por inaugurado el evento y en su meduloso mensaje formuló algunas reflexiones sobre la cuestión del liderazgo, enfocado sobre el escenario local y sobre las circunstancias y consecuencias de su ejercicio. Entre otros conceptos, dijo:

 

 

 

“En la Argentina, el liderazgo se podría vincular fácilmente con la cuestión temporal y con el populismo. Dicho del mejor modo, es el aprovechamiento neto, total, de la circunstancia histórica, que en lugar de convertirlo en una doble responsabilidad, esa circunstancia de liderazgo en realidad se trata de una mala y nociva lectura del poder”.

 

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“Poder por el cual, las circunstancias de la posibilidad de liderazgo en países como en la Argentina se convierten en la posibilidad de atraer y lograr para si, la consolidación del supuesto mal llamado poder”, añadió.

 

 

 

“La primera definición es, en tal caso, una la lectura del ‘El Príncipe’ de Nicolás Macchiavello. Entonces uno, hoy, a esta altura del nuevo siglo puede perfectamente pensar que quienes intentaron ser líderes de esa manera, hicieron una mala lectura respecto de la cuestión del poder”, subrayó Posse.

 

 

 

“El poder no es poder detentar y acrecentar los medios en un solo puño, o dentro del grupo de los amigos, sino que el poder es el prestigio, es el consenso social, el diálogo, es la búsqueda del equilibrio, es acertar, errar como en toda tarea humana, como toda tarea que puedan tener grupos de hombres, pero inmediatamente poder esclarecer, corregir y retomar el camino común”, enfatizó el jefe comunal.

 

 

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“Si pudimos llegar a un principio de esclarecimiento, respecto de la cuestión del poder, hoy es en la política donde comienza la búsqueda de liderazgo, si bien hay responsabilidad en los otros liderazgos empresario, gremial, intelectual, etc. Porque se entiende que es la democracia que busca la República para que se pueda implementar en todo lugar”, sostuvo luego.

 

 

 

 

“El liderazgo implica una habilidad para conducir nuestra propia vida hacia un fin de plenitud y excelencia. Plenitud interior por saber que se hace lo correcto y excelencia en el servicio al prójimo y la comunidad”, apuntó más adelante.

 

 

 

“Muchas de las crisis que padecemos se deben al fracaso de supuestos ‘líderes’ quienes, intentando conducir a otros, no pueden siquiera conducir sus propias vidas familiares y conductas personales. En otras palabras, conducir con el ejemplo”, señaló el intendente.

 

 

 

“Entonces está la cuestión de los países y la política como liderazgo de lo social. La política está integrada por una generación o dos y es allí donde nuevamente hay que pensar en el equilibrio entre la cuestión del poder, la cuestión trascendental, el hoy, las generaciones que siguen, la humanidad”, agregó.

 

 

 

“Para ello trataremos de acercar una primera definición y es que el liderazgo, sin ninguna duda, debe estar imbuido de una sensación fuerte, intensa, íntima de plenitud en una búsqueda de excelencia”, resaltó para añadir que “se entiende, entonces que el liderazgo, en tal caso, no es el camino. Es el horizonte y, por tal, una utopía. Nadie llegó jamás ni llegará al horizonte pero el liderazgo puede marcar el camino”.

 

 

 

“Todos hemos transitado, desde nuestra niñez, el camino de los sueños. Quienes tienen el potencial, el talento, la calidad humana para entender que el liderazgo nos lo puede dar Dios circunstancialmente, en tal caso se habrá de convertir en la búsqueda del horizonte común. Pero debemos comprender que la vida humana es finita y por ende, lo que enaltece al ser humano, en sus circunstancias y en el tiempo, es tener la posibilidad de trascender  entendiendo a esto que se trata de lo que se deja al que nos seguirá”, puso de relieve Posse.

 

 

 

“Quienes estamos en la mitad de la vida compartimos la transición de dos o de tres generaciones, atento a la extensión de la longevidad en plenitud y con calidad de vida. Por eso, cuanto más lejos lleguemos, más debemos concretar, insisto, esa sensación íntima, intensa que es el poder trascender”, destacó para agregar seguidamente que “el liderazgo es circunstancial y no necesariamente tiene que ser detentando el poder. Menos aún el poder de los medios del Estado”.

 

 

 

“Ahora diré, con equilibrio, con cuidado. Más de una vez se ha dicho que ‘el problema es de todos’ para que los verdaderos responsables no se hagan cargo del mismo”, indicó.        

 

“La cuestión, en países como la Argentina, el problema a resolver es la de encontrar una generación completa que se haga cargo del liderazgo político para que pueda llevar adelante el liderazgo social y de una comunidad toda con categoría de Nación, insertada en el mundo, para colaborar en la resolución de situaciones tales, recordando las palabras del obispo de San Isidro, Jorge Casaretto,  como lo es el de la pobreza y la exclusión social”, remarcó.

 

 

 

“Es necesario pensar un país, con toda la geografía que tiene, con todos sus recursos naturales, con la excelencia muchas veces revelada en recursos humanos, con raíces en la educación para la excelencia y la integración, con un país inserto en el mundo, que cuente finalmente con un liderazgo positivo”, concluyó Gustavo Posse.

 

 

 

Tras el introito del intendente anfitrión se iniciaron las exposiciones. El instructor distrital Ernesto Morán abordó el tema “Descubriendo al líder” y mas adelante la Dra. María Fernanda Nuevo, juez en lo civil y comercial y esposa del intendente, desarrolló conceptos sobre  “El compromiso del liderazgo”.

 

 

EL LIDER QUE SABE ESCUCHAR AL OTRO

 

María Fernanda –quien entre muchas actividades  integra además  el Rotary Club de Martínez-  destacó que “un líder tiene la función de conducir. También se lo llama guía por su condición de visualizar lo que vendrá –precisó- .  Ver implica prestar atención al territorio que es todo aquello que nos presenta el mundo. Y en nuestros pensamientos, desde que nacemos, nos enseñan a encarar las cosas de determinada manera otorgándole un particular enfoque, así es como armamos diferentes mapas de pensamiento”.

 

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La expositora abundó en detalles sobre cómo se puede armar un líder desde el territorio que se tiene y desde los mapas de pensamiento que se plantean. “Si recorremos la historia vamos a advertir que hay distintos tipos de  líderes y que el hombre con su relación humana ha realizado puentes, caminos, endicamientos y ha construido el mundo. Y se ha hecho a través de líderes que han observado y han  lograron sus objetivos. Esto también pasa a nivel de las empresas: el líder siempre busca los objetivos a lograr e indica qué es lo que hay que hacer. Es más fácil porque sabe si son  las personas a las que hay que motivar o qué se necesita para lograrlo. Pero como rotarios debemos pensar en observar nuestra comunidad y así fijarnos objetivos para  estar comprometidos con nuestra sociedad y con el mundo”, aconsejó.

 

 

 

Y a renglón seguido relató su experiencia en el Rotary de Martínez. “Nosotros cuando encaramos la tarea de servicio en nuestra comunidad nos planteamos un plan. Con él fuimos a distintas escuelas, vimos que había no pocos chicos con problemas de visión y tomamos nota de cuántos de ellos necesitaban anteojos. ¿Qué quisimos cambiar? La situación de muchos que no tenían la posibilidad de acceder a una salud y estaban limitados en su visión;  entonces llevamos a los médicos a los establecimientos escolares y produjimos un cambio. Nos planteamos un objetivo y lo logramos” , enfatizó al tiempo que recomendó  siempre pensar en qué se debe mejorar y qué conservar “. 

 

 

“Como rotarios –añadió-  tenemos muchas cosas buenas que debemos preservar, entonces dentro de nuestros recursos humanos tenemos que fortalecer lo que nos sirve y conservarlo para luego empezar a ver más allá del cambio que podemos generar en  nuestra sociedad. Tal vez pensando en Gandhi, el decía  que ‘tenemos que ver el mundo que deseábamos ver’ y creo que es lo que Rotary trata de hacer y lo que nosotros intentamos”.

 

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Como mujer y juez, Fernanda observó que la sociedad requiere de liderazgos diferentes, no tan racionales sino que puedan tender un puente de empatía. “Hace falta ser sensible, saber escuchar al otro para advertir así cuales son sus necesidades”.

 

 

 

LIDERAR EN VALORES RESOLVIENDO LA POBREZA COMO META:

900 MIL JÓVENES SIN FUTURO

 

A su turno, el obispo de la Diócesis, monseñor Jorge Casaretto habló de “Liderazgo, valores y legado comunitario” rescató el pasaje del Evangelio donde Jesús le explica a sus discípulos que liderazgo no es ejercer un dominio sobre el otro como si fuesen sus dueños, sino quequien quiera ser rico debe convertirse en servidor de ustedes y el que quiera ser primero deberá ser servidor de todos. Porque el hombre no vino para hacerse rico sino para servir y dar su vida al prójimo”, expuso.

 

 

 

Refiriéndose a un contexto mucho más existencial planteó que el principal problema de la gente es la pobreza. “En nuestro país la pobreza y la exclusión son problemas reales. 900.000 jóvenes –contabilizó preocupado  no estudian ni trabajan. Este es el problema real, el más serio de la Argentina. Tenemos una hipoteca social fuertísima. Estos son los problemas reales que se dan en contextos existenciales y la sociedad debe ser mucho más consciente de cuáles son los problemas que la afectan. Y por lo tanto los líderes de una sociedad son aquellos que llegan a tener la visión, un  diagnóstico bueno acerca de esos problemas y encarar acciones concretas para solucionarlos”.

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El pastor admitió que los liderazgos que apelan al individualismo no son buenos. “Si sólo solucionan mi vida no sirven –aclaró-.  La solución siempre tiene que estar conectada con lo que es problema para los otros. En este contexto concreto los liderazgos de la Argentina tienen que ser los que realmente asuman los problemas del país. Acá estamos todos desafiados”, compuso.

 

 

Y para finalizar remarcó que el poder debe ser servicio. “En la Argentina en este momento, ¿en qué están ocupados los líderes políticos? –cuestionó-. Fíjense al espectáculo que estamos asistiendo donde da la sensación que hay  dos Argentinas. Una, la del debate del Banco Central y la otra que son estos 900.000 jóvenes que como expliqué no tienen trabajo. ¿Hay una desconexión entre los problemas reales de la Argentina y los temas de debate de los líderes políticos? Esta es la  problemática mas importante del país, a mi entender la más seria” y aconsejó que a ella se avoquen los esfuerzos de la sociedad civil.

 

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Muchas son sin duda las tareas que desde un voluntariado de servicio, ejerciendo un sano liderazgo, se pueden encarar por cambiar la realidad de miles de argentinos que hoy están sumidos en la exclusión o bien no perciben un futuro halagüeño. Como bien dice el Obispo la celebración  del Bicentenario no puede agotarse en festejos patrióticos sino en encarar estas asignaturas pendientes como temas prioritarios de la agenda social. “Debe ser el tiempo de encarar los grandes desafíos que tenemos como sociedad para encontrar los caminos que le permitan a todos los argentinos vivir en la dignidad de hijos de Dios”, concluyó. Nada mas cierto.