Supremacía Hindú. Los de Torcuato alcanzaron el tetracampeonato de la URBA

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5/10/09. En una buena producción, el equipo de Don Torcuato superó en la final al CASI por 31 a 22 y se consagró por cuarta vez el mejor de la URBA. Fue en un partido que lo tuvo todo: no faltó el elefante ni las cornetas, buena dosis de entrega de parte de los dos, emoción a raudales, una suerte de duelo de drops, tries, giros en el marcador, amarillas, roja y obviamente… suspenso. Con todo, Hindú demostró solidez, que está en un muy buen momento, aprovechó los dos hombres de mas que en algún pasaje tuvo y se llevó el título, ahora sí… ¡A brindar por el tetra!

 

Atrapante y postergada definición del Top 14. Recta decisiva para la temporada 09 del rugby de la URBA. Los dos mejores de la temporada en procura de la gloria en ochenta minutos a ganar o morir. Y si bien el plato fuerte contaba con un favorito de antemano (Hindú había dado muestras de no tener diferencias entre forwards y tres cuartos y dispone de un tryman temible como Hernán Senillosa) nada estaba dicho porque la Academia a puro corazón se había juramentado dejar todo en la cancha para volver por los fueros.

 

Era el partido deseado, ese que todo rugbier sueña jugar algún día. San Isidro amaneció embanderado con pasacalles con distintas consignas: “Bienvenidos a la Catedral del Rugby”, “5 títulos no es igual a 100 años de historia”, “La alegría es solo blanquinegra”, había globos blancos y negros y el tronar de cornetas remedando la Autobomba de la Cebra. La definición de este apasionante Top 14 se palpitaba desde temprano en un pueblo donde late y se respira rugby. A tal punto que a poco de comenzar el partido emergió tras un ingoal el gigantesco elefante de la visita.

casi-hindu2Más de 12 mil personas poblaron la bien llamada Catedral del Rugby. No faltaban históricos de ambos clubes, como los O’Reilly, los Beccar Varela, los Iachetti, los Quesada, los Landajo y el clan Fernández Miranda en pleno, figuras del momento en el deporte, como Juan Martín del Potro, fana académico, artistas, mujeres bonitas y reconocidos vecinos de Don Torcuato y los de San Isidro dando marco a un espectáculo que se vivió intensamente tanto afuera como adentro de la cancha. Hubo duelo de hinchadas, pelucas, color, banderas y las sombrillas de la Cebra. Sin embargo, el festejo fue todo de Hindú, que por cuarta vez al hilo se alzó con el título del mejor equipo de Buenos Aires y alcanzó también varios récords: es desde que los torneos tienen este tipo de definición mano a mano el primer Tetracampeón –algo que sólo habían conseguido Buenos Aires, CASI, CUBA, SIC y Alumni, todos, organizados por la UAR– y, en esa instancia, es el único que cuenta todas las definiciones con título.

El equipo de Torcuato era una máquina en los lines, sólido en el scrum, compacto en defensa, y cuando tuvo que atacar, no perdonó. Lo hizo en el momento justo en el que la Academia contaba con dos hombres menos. Sin embargo, el partido se le tornó complicado a los tigrenses y el Atlético nunca dejó de pelear para recuperar la corona portó por última vez en 2005.

Fue tan así, que recién sobre a los 31 del segundo tiempo, con una patada de Manuel Fernández Miranda, la historia se cerró con el resultado que finalmente iba a hacer delirar a los miles de hinchas que se acercaron para festejar junto al característico elefante.

Las defensas cerradas y la presión hicieron que la patada se transformara en un recurso principal para limpiar y jugar en campo rival. Y en ese terreno pesó la experiencia de los vigentes campeones. Los hermanos Fernández Miranda se cargaron el equipo al hombro y le dieron a Hindú la chance de acercarse un poco más al cuarto título al hilo.

De uno de los hermanos nació el primer try del partido. Manasa hizo un Kick, Ostiglia la tomó y tras pasar por Fernández, la pelota llegó hasta Agulla, que llegó al in goal rival para hacer delirar a las camisetas celestes y amarillas que colmaron la Catedral.

Con el partido 8-3, porque Hernán Senillosa erró la conversión, CASI tuvo la chance de responder y lo hizo con dos drops de Landajo y Pandelo, respectivamente, que lo llevaron al frente del marcador. Pero el campeón es campeón por algo. Y lo demostró con reacción y empuje para forzar un penal que esta vez Senillosa no falló. Hindú, otra vez al frente en un partido disputadísimo.

Así y todo en la etapa inicial no estaba dicha la última palabra. En la última jugada Agustín Figuerola anotó su primer penal para que la Academia terminara arriba por 12-11.

Ya en la segunda etapa el tackle de cuello de Santiago Casanova contra Fernández dejó a su equipo con uno menos durante diez minutos. Luego Senillosa revirtió el marcador con un penal y Agulla estiró diferencias por un try aprovechando un pase forward (¿el referee???) de Mateo Iachetti.

Más tarde vino el infantilismo de Juan Headen, quien recién ingresado, no tuvo mejor idea que salivar a Mariano de la Fuente y se ganó otra tarjeta amarilla. La Academia terminó con 13 hombres y lo pago caro, porque Agulla aprovechó para desparramar rivales y llegar a su hat trick.

Contra todos los pronósticos CASI, que luego de contar con dos menos logró recuperarse y le devolvió el ida y vuelta al partido. Volvieron los de la amarilla y con un penal de Agustín Figuerola, y a 11 minutos del final, un try de Pandelo, convertido por Figuerola, los de San Isidro quedaron a seis puntos de su rival. Pero cuando no, apareció Manuel Fernández Miranda, la gran figura del tetracampeón y con un drop selló el 31 a 22 final.

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A instantes del final vio la roja Diego Liberato de Hindú por tirar una patada alevosa (¿muchachos hubo varias, acaso no se penalizan?), pero la fiesta se desató porque Sánchez Ruiz pitó y el elefante apareció para festejar por cuarto año consecutivo.

Con mezcla de jugadores experimentados y jóvenes, todo un clásico en el Hindú de los últimos años, los campeones se impusieron nuevamente. El wing Belisario Agulla fue la gran figura de la noche al conquistar tres tries y Manasa con su drop se llevó todos los aplausos.

A pesar de caer, el CASI jamás bajó los brazos y hasta el minuto final intentó remontarlo.

La historia marcará a los de Torcuato como el conjunto más ganador de la década, con cuatro consagraciones (SIC tres, Atlético del Rosario, Alumni y CASI, uno). Lo que se dice…. Supremacía Hindú.

Síntesis

CASI (22): Juan Ignacio Figuerola; Federico Salcedo, Nicolás Pandelo, Norbeto Méndez y Franco Fasano; Martín Landajo y Agustín Figuerola; Santiago Sanz, Gonzalo Brasich y Francisco Corbacho; James Stuart y Juan Campero (capitán), Santiago Casanova, Pablo Gambarini y Federico Villagra. Entrenadores: Fernando Morel, Fernando González Montalvo y Hernán Alvarado.

Hindú (31): Francisco Bosch; Belisario Agulla, Hernán Senillosa, Santiago Fernández y Francisco Díaz Bonilla; Juan de la Cruz Fernández Miranda y Nicolás Fernández Miranda (capitán); Mariano Lorenzetti, Mateo Iachetti y Lucas Ostiglia; Iván Perok y Patricio Solano; Lucas Toro, Augusto Faraone y Mariano de la Fuente. Entrenadores: Jorge Pulido, Gonzalo Pulido y Maximiliano Martínez.

Primer tiempo: 5m drop de J. Fernández Miranda (H); 7m drop de Méndez (C); 12m try de Agulla (H); 17m drop de Landajo (C); 27m drop de Pandelo (C); 29m penal de Senillosa (H); 39m penal de A. Figuerola (C). Segundo tiempo: 6m penal de Senillosa (H); 12m y 16m tries de Agulla convertidos por Senillosa (H); 22m penal de A. Figuerola (C); 29m try de Pandelo convertido por A. Figuerola (C); 31m drop de J. Fernández Miranda (H).

Cambios: en el segundo tiempo, 8m-14m Juan Headen por Brasich (C); 20m Felipe Muslera por Sanz (C); 24m Martín Brousson por Villagra y Juan Headen por Casanova (C); 28m ñ 36m Joaquín González por Lorenzetti (H); 36m Diego Liberato por Lorenzetti (H).

Amonestados: en el segundo tiempo, 6m Casanova (C); 14m Headen (C); 26m Toro (H).

Expulsado: en el segundo tiempo, 39m Liberato (H).

Arbitro: Cristian Sánchez Ruiz.

Cancha: CASI.