Tigre. AVANZA LA OBRA DE AMARRAS PÚBLICAS EN EL CENTRO. Una demanda histórica de los isleños se hace realidad

 

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16/09/09 Después de 30 años de espera, una demanda histórica de los isleños de Tigre está a punto de ser terminada. Las amarras “Hugo Del Carril” tendrán espacio para 54 embarcaciones, servicio de vigilancia y cámaras de seguridad del COT las 24 horas. Con el objetivo de generar condiciones igualitarias en la circulación fluvial en Tigre, se inaugurará la obra de amarras públicas “Hugo Del Carril”, que permitirá a los vecinos que transitan con sus embarcaciones contar con un espacio útil y cómodo.

 

 

El gobierno municipal de Tigre se apresta a inaugurar las amarras isleñas “Hugo del Carril” que con una capacidad de amarre de 54 embarcaciones, tendrá servicio de vigilancia y cámaras de seguridad del COT las 24 horas. Cada módulo dispondrá de un pedestal para provisión de agua potable, además de un artefacto para iluminar la superficie de tránsito. La eslora máxima de las embarcaciones a amarrar será de 6,40 metros y la de su manga será de 2,00 metros. No se podrán superar estos límites bajo ninguna circunstancia.

 

Las amarras funcionarán todos los días del mes de 7 a 22 horas. En el resto del horario, contarán exclusivamente con personal de vigilancia. Podrán ser retiradas dentro de ese lapso solamente aquellas embarcaciones cuyos propietarios hayan efectuado el pago de una estadía que cubra el horario en curso. Se hará mediante la presentación del ticket correspondiente, junto a la exhibición de la Tarjeta de Identificación que acredite su identidad. En caso de contar con un ticket abierto (por hora), solo se podrá efectuar el retiro a partir del inicio del siguiente turno.

 

La iniciativa cubre el conflicto de los vecinos de la primera Sección de Islas, que carecía de muelles públicos necesarios para su conexión con el núcleo urbano a través de los ríos que utilizan para trasladarse a su trabajo, a su escuela, a la universidad y a los centros de salud. El deterioro natural de las instalaciones ya existentes se multiplicó a causa del mal uso que el transporte colectivo fluvial hace de ellos, golpeándolos implacablemente.

 

Los muelles públicos.

 

Se diseñó un muelle tipo que permite el ascenso y descenso de los vecinos al transporte fluvial colectivo, pero no su permanencia con otros fines. El muelle se modula estructuralmente en tramos de dos metros lineales. A esa distancia se disponen pares columnas de postes de eucalipto tratado de 7,50 metros lineales de largo, enterradas en el lecho del río con una profundidad de 2,00 metros mínimos. Separadas en su ancho  a 1,35 metros a eje de cada columna. Se prevé un promedio de tres tramos de 2,00 metros, que determinan un largo de 6,00 metros totales para la superficie tránsito. Este largo puede variar de acuerdo con la necesidad de avanzar río adentro hasta contar con una profundidad accesible para el calado de las lanchas. Este largo variará en módulos de 2,00 metros.